(PR/NormaMigueles) Una Resolución de la jueza Civil de los Tribunales de Venado Tuerto Celeste Rosso, obliga al NBSF a devolver a una clienta de Firmat una suma en dólares retenida contra su voluntad, mas intereses y pagar la suma de 300 mil pesos por daño moral y 500 mil pesos por daño punitivo. La jueza en este caso aplica la ley de defensa al consumidor 24240, atento a que bancos y demás entidades financieras están comprendidos en esa norma.
“Así se ha dicho así que los bancos por su espíritu de lucro y por la actividad que desarrollan, deben garantizar la seguridad de las personas y bienes de sus clientes”, advirtió entre sus fundamentos la magistrada.
En otro párrafo señaló: “En el desarrollo de la práctica actual para concretar operaciones bancarias, tales como la descripta por la actora, se advierte que el uso de las plataformas digitales para concretar operaciones bancarias por parte de consumidores genera nuevas formas o maneras de vulnerar la seguridad de los usuarios que eran impensadas en la modalidad de gestión presencial”.
“A ello cabe agregar que tales riesgos han sido introducidos por el proveedor en forma unilateral, más allá de la eventual adhesión de los usuarios bancarios al sistema de referencia. Hete aquí la razón que justifica que el riesgo generado por las herramientas digitales quede a cargo de las entidades bancarias”
EL PHISHING
La mujer a través de su representante legal, el abogado José María Cónzoli, planteó oportunamente ante la justicia que sufrió una maniobra de phishing denunciada el día 23 de septiembre del 2021, donde personas desconocidas accedieron a su cuenta sacando el dinero de su caja de ahorro.
Cuando llegó el hijo la mujer le comentó lo sucedido y este se comunicó con el banco con el que operaba, de donde le sugieren que se comuniquen a través de un 0800.
El 24 de septiembre de 2021 era feriado en la ciudad de Firmat, por lo que la entidad bancaria estaba cerrada. La denuncia fue radicada en sede policial, y ampliada el día siguiente al advertir que también faltaban de la caja de ahorro 900 U$D. Finalmente el 27 pudieron hacer el reclamo, recibiendo como respuesta días después un mail donde le decían que no se hacían cargo del problema.
Los reclamos continuaron, incluso ante la OMIC de Firmat, sin que obtuviera respuesta satisfactoria, apelado como último recurso a la justicia.