(PR/Pablo Salinas) Una fuerte recesión está viviendo la mayoría de los comercios argentinos, situación que también se siente en la “Esmeralda del Sur” que por lo común va atravesando las distintas crisis económicas con bastante solvencia.
En esta ocasión la crisis se está haciendo notar, y así lo graficó el gerente del Centro Comercial, Industrial y Servicios de Venado Tuerto, Ezequiel Coello en diálogo con VerTV: “Venimos de meses muy duros, y los comerciantes están haciendo todo un esfuerzo para traccionar ventas. En la parte textil, por los fríos que llegaron se empezó a reactivar algo, pero hay otros sectores que la están pasando complicado”.
En este marco comentó que los empresarios les agradecen las acciones que se implementan desde el Centro Comercial, pero reconocen que la situación es muy compleja: “Al mes le están sobrando 15 días. La primera semana los comerciantes tienen ventas relativamente aceptables, de ahí entran a caer en la segunda, y los últimos 15 días del mes sobran”, planteó el dirigente, para luego ironizar: “Cambiamos el calendario o hacemos algo, porque nos están sobrando 15 días”.
El gerente del Centro Comercial también se animó a opinar sobre el plan del Gobierno nacional para fomentar el blanqueo de los “dólares del colchón”, al aseverar que “estamos en Argentina, y toda persona para blanquear el puchito que tiene en el colchón tiene temor porque hay un vacío legal y jurídico en el medio. Hay un Estado nacional al que le tributamos ciertos impuestos, y ofrece esta amnistía, esta posibilidad de blanquear, pero después cada Estado provincial tiene la potestad de cobrar impuestos sobre eso que vos estás blanqueando”.
En este contexto consideró que debería existir una “uniformidad de criterio en todo esto. Además, hay un lado peligroso porque se está abriendo una puertita para que haya un blanqueo de capital que no es del todo limpio. Tenemos toda una política de lucha contra el narcotráfico y el lavado de dinero y yo le tengo miedo a estos grises en la legislación”.
Coello también hizo foco en que “el argentino promedio tiene el tema del dólar en la cabeza, porque acá te sube el dólar y de inmediato aumentan todos los precios, aunque un 80% de los componentes de ese precio no tengan nada que ver con el dólar, pero por las dudas aumentan. Entonces el comerciante, que es el último eslabón, el que pone la cara ante el cliente, es el que recibe todas las cachetadas”.
Al mismo tiempo, se mostró preocupado ante la posibilidad de que “terminemos teniendo un dólar barato para importar todo y que terminen cerrando un montón de fábricas, para que después nos encontremos con que no tenemos más dólares, tenemos que cerrar la economía, y otra vez volver al cepo y lo mismo de siempre”.




