En un intento por frenar el descontento social creciente, el Gobierno nacional acordó con la CGT el otorgamiento de un bono de fin de año de 5 mil pesos para cada trabajador. Este plus será obligatorio y se pagará en dos tramos de 2500 pesos cada uno, el primero en noviembre y el segundo en enero. La medida debería alcanzar a todos los trabajadores privados, estén o no bajo convenio.
Al respecto, el presidente del Centro Comercial e Industrial de Venado Tuerto, Pablo Rivelli, planteó: “Viene Papa Noel con billetera ajena. Es fácil hacer eso, la política en general viene haciendo esto, con los recursos de los otros tratan de acomodar una situación que se debe resolver desde otro lugar, sin prometer cosas que después no se pueden cumplir”.
Bajando al orden local, el dirigente recordó que “las empresas de nuestra ciudad son pymes, las empresas medias tienen tres o cuatro hasta 20 empleados y las más grandes que tienen un nicho exportador también están en problemas, porque los mercados no se abrieron con la devaluación”.
En cuanto al acuerdo entre el Gobierno y la CGT, Rivelli apuntó que “a nosotros nos encantaría poder pagar más sueldos, el bono, porque entendemos que sería una manera de poner en el bolsillo de la gente unos pesos que después van a volcarse nuevamente a la economía local, pero la situación financiera es agobiante. No tiene el comercio posibilidades de pagar esto”.
Desde el Centro Comercial local se realizó un planteo ante el Consejo Directivo de CAME (Cámara Argentina de la Mediana Empresa) describiendo “que estamos en una situación más que difícil y proponemos que si esto hay que pagarlo se pueda tomar a cuenta de impuestos, que el Estado nacional haga un esfuerzo también, porque sino Papa Noel con billetera ajena somos todos”.