El sector agropecuario, pese a tener siempre algún motivo de queja, es uno de los pocos que mantiene un nivel de ganancias importante campaña tras campaña.
Sin embargo, la reinversión en maquinaria, que podría fortalecer al sector agroindustrial, no se está produciendo y en consecuencia el buen momento de este polo económico queda encapsulado en el sector.
“Los ‘fierros’ valen una locura en dólares, los créditos no son tan buenos, la macroeconomía es tan complicada que las tasas no te benefician. Los créditos a 0 por ciento, que siempre traen algo oculto, ya no existen más”, explicó el presidente de la Sociedad Rural venadense, Esteban Boyle.
Profundizando su análisis, el dirigente planteó que “el productor está con miedo porque venimos de dos o tres años que no fueron realmente buenos. Estaríamos firmando un empate, porque no estamos como para salir a tirar manteca al techo”, evaluó Boyle con una extraña lógica si se tiene en cuenta el contexto del resto de la sociedad argentina.
Además de plantear el “riesgo empresario” que implica la “industria a cielo abierto” que es el campo, el dirigente se quejó porque “la carga impositiva es enorme y creo que la tenemos que empezar a bajar un poco, porque el sector pyme tiene serias complicaciones para pagar los sueldos. Esperemos que esto despegue un poco”.
En lo que se refiere a la campaña agraria el presidente de la Sociedad Rural consideró: “Si podemos levantar esta cosecha que se va a proyectar, hablamos de 140 millones de toneladas, no me cabe ninguna duda que la vamos a necesitar todos”.