Carlos Aldasoro dialogó con PUEBLO Regional sobre el estado económico de la ciudad y el futuro de los emprendimientos empresariales. Al respecto, apuntó que en la Argentina siempre “todo va cambiando constantemente, sobre todo en este rubro, donde incide muchísimo y repercute en la gente, porque en el turismo, cuando hay movimientos en el dólar, se para todo”.
Con el alza en el dólar hay una importante porción de clase media que tuvo que readecuar sus consumos. En ese sentido, el empresario local especificó que la caída en el consumo se observa más aún en los productos que no son de primera necesidad.
En lo referido al ámbito del turismo, a pesar de ser un espacio de consumo de sectores con posibilidades, Aldasoro explicó que “no afecta a todos por igual” y que “en esto también se da la grieta, porque hay gente que cobra en dólares y entonces sigue viajando”.
Además, señaló que “hay otros que juntaron algunos dólares en algún momento, y esa gente ya no puede viajar. Este verano se va a ver que habrá un turismo local”. En relación a las chicas que cumplen quince y viajan para festejarlo, Aldasoro adujo que “la fiesta también cuesta y es gente que tiene que juntar el dinero, el viaje sale alrededor de 6.500 dólares, no hay tanta diferencia con una fiesta grande”.
Uno de los rubros que destaca que cayeron son los sectores medios que viajaban de compras a Miami. “Hoy ir con la familia al Caribe te sale una barbaridad, ese es el target que ha desaparecido”, confirma. En términos de porcentaje, Aldasoro aduce que hay un 35% de disminución en los viajes. “Tenemos que esperar las vacaciones para ver cómo se desarrollan, pero la experiencia dice que se volcará al turismo nacional”, completa.
Con las últimas restricciones impuestas por el gobierno, el “cepo” macrista, no se pueden comprar más de mil dólares por día y hasta 10 mil por mes. Precisamente, desde hace dos meses y medio instalaron una sucursal de Transatlántica, una casa de cambio de Rosario. Sobre la cantidad de dólares que compran los venadenses, Aldasoro comentó que las adquisiciones son diversas, pero “no son grandes cantidades”. “Hay gente que tenía plazos fijos que los pasó a dólares, algunos que les sobran algunos pesos y los transforman a dólares porque es el único reparo que tienen ya que no se puede comprar un terreno o una casa”, argumenta.
