(Pueblo Regional) Este verano tuvo características especiales para la región, con fuertes temporales que generaron todo tipo de complicaciones. Para el caso de Venado Tuerto esto redundó en una proliferación inusitada de mosquitos y un crecimiento de pastos difícil de controlar. A la par estuvieron los anuncios del intendente, Leonel Chiarella, y el jefe de Gabinete, Diego Milardovich, sobre recorte de horas extras y un importante ahorro de combustibles.
Rápido de reflejos el ex intendente municipal, ahora secretario de Integración y Fortalecimiento Institucional provincial, José Luis Freyre, consideró que estos recortes de alguna forma podrían haber tenido influencia directa en las problemáticas de los mosquitos y el desmalezado.
En este sentido el secretario de Infraestructura y Medio Ambiente municipal, Alberto Armas, opinó que “el tema no es que estamos cortando menos el pasto, el problema es que estamos siempre peleando contra el clima. El pasto con esta secuencia climática tiene dos problemas: no se puede trabajar con lluvia, con lo cual nosotros tenemos todo un esquema de tareas que no podemos cumplir, y a la vez se acelera el crecimiento de las malezas”.
Por otra parte, aseguró que el corte de pastos “se hizo con los mismos recursos humanos que antes. Nosotros advertimos que ni bien arrancamos con el programa nos faltaron herramientas para hacerlo. Tuvimos que encarar un proceso de compra de motoguadañas, tuvimos que adquirir cerca de 20 equipos nuevos”.
Para graficar la situación Armas planteó que “en 60 días de gobierno tuvimos tres inundaciones, el lunes tuvimos 84 milímetros en 35 minutos, es decir 160 milímetros en una hora. Nosotros tenemos un sistema de drenajes para 40 milímetros por hora, entonces si llueven 160 milímetros en una hora la estructura de desagüe no alcanza”.