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Rufinense, perdió a su hija, lucha por esclarecer ese asesinato, es ejemplo de gremialismo honesto y es la dirigente sindical más importante del sur de Santa Fe

(PR- Pablo Tomás Almena) María José Barrio es la secretaria general de los trabajadores municipales de Rufino. La semana pasada (3 de marzo) asumió como secretaria de Organización de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de Santa Fe (FESTRAM) y congresal en la Confederación de Trabajadores Municipales de Argentina (CTM) durante el mandato 2022-2026, transformándose así en la dirigente gremial del sur provincial que ocupa el cargo más importante en un gremio en la provincia de Santa Fe. A ese sitio llegó por el enorme respeto que se ha sabido ganar entre la dirigencia gremial provincial y, principalmente, por el enorme apoyo de las bases del gremio en su ciudad y en las localidades donde tiene representación gremial, donde todo el mundo la conoce como una leona a la hora defender los derechos de sus compañeros trabajadores, y de honestidad a la hora de administrar los fondos de su organización.

Pero además “La Negra”, como la conocen en Rufino, es mamá de dos adolescentes-mujeres: Giulina y “Maleza Demencia”. La primera de ellas tenía 20 años y perdió la vida en un trágico accidente de tránsito, en las calles Cobo y Catamarca de la localidad de Rufino. María José denunció que su hija fue abandonada tras el accidente, que quien conducía el vehículo en que se desplazaba su hija de acompañante estaba ebrio y que tampoco tenía licencia de conducir.

“A Giu no sólo le arrebataron la vida Francisco Ayestarán y Diego Vazquez en un accidente de tránsito. A Giu le arrebataron la vida cuando la abandonaron, cuando la desconocieron, cuando no llamaron a su mamá para asistirla. Le arrebataron la vida con su imprudencia y su falta de empatía”, reclama en sus redes. Agregando: “Seres inhumanos incapaces de sentir el sufrimiento del otro, el dolor del otro. La mataron quienes se mostraron como seres despreciables ante la vida de Giu, quienes decían ser sus amigos, que salieron ilesos a los escasos minutos del accidente, y sus padres que en ningún momento caminaron mis zapatos ni los de ella”.

El 3 de marzo, tras su asunción como secretaria de Organización de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de Santa Fe (FESTRAM) y congresal en la Confederación, acompañada allí en la sala por su hija Maleza Demencia, María José Barrios demostró ser un enorme manojo de dolores y valentías, de ovarios y templanza. “En honor y en memoria de Giu, hoy asumí como secretaria de Organización de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de Santa Fe (FESTRAM) y congresal en la Confederación (…). Junto al amor de familiares, amigxs y compañerxs de Comisión, que estuvieron representadxs con la presencia de mi hijita Maleza Demencia, y con el acompañamiento de mi compañero, amigo, y maestro Claudio Leoni, quién me abrió las puertas para ser la dirigente que soy hoy; pero también quién creyó en mi capacidad y en mi persona, quién contuvo y caminó a mi lado en los momentos más difíciles de mi vida. Gracias por tanto Claudio. Porque las personas que estamos tan rotas y lo bastante locas como para creer que podemos cambiar el mundo, somos las que lo hacemos, y eso sentí siempre, que tenía la posibilidad de cambiar un montón de realidades de este mundo, del mundo de mi gente, del mundo de mis hijas y de mi mundo ¡Gracias por tanto amor! iMi “Giu” está orgullosa, en dónde esté!

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