“Concedeles, aunque sea un vuelto chico, un humilde milagrito para que puedan zafar”, dice un fragmento de la canción “La villa de los milagros” de Adrián Abonizio, sobre la que Paul Citraro inspiró el concepto que ayer finalmente quedó plasmado en hechos: la Virgen de los Milagritos. La mano creativa de Alejandro Merola con un amplio grupo de colaboradores materializó la idea y la figura ya forma parte del paisaje venadense, sobre la ruta nacional 8, en la entrada de la empresa Mecan.
La enorme estructura de más de 5 metros de altura se construyó con más de 10 mil tornillos y bulones. Todos materiales que se encontraban en la empresa de la familia Borra que apadrinó el proyecto, en el marco del programa Cultura & Sociedad.
“En este proceso aprendí que fue un trabajo realizado a partir de un acto de fe, que es necesario tenerla para vivir. Sin fe no se puede hacer nada”, deslizó Merola durante la presentación realizada en la tardecita de ayer. Y así lo evidenciaron las decenas de personas que se acercaron hasta el punto de encuentro: unos para contemplar una obra de arte, otros para dar una muestra de fe cristiana y –por qué no- pedirle algún milagrito a esa virgen, por más modesto que sea.
Fe como la que tuvo Merola para encarar semejante trabajo y hacerlo realidad en apenas 33 días de trabajo. Esa acumulación de acero fue tomando forma hasta convertirse en una obra digna de admiración, a la que muchos ya le están rezando. Es que la propia iglesia le dio su aval a la propuesta: ayer estuvo presente el obispo Gustavo Help y el padre Martín Cabrera realizó la bendición correspondiente.
En el medio, el proyecto involucró a unas 15 personas interactuando, entre diseñadores, editores, gráficos, soldadores, iluminadores, ceramistas y artistas plásticos. Todo bajo la conducción conceptual de Citraro y la empresa Mecan, y la dirección artística de Merola.
Ese proceso quedó plasmado en tres videos realizados por Marcos Navarro, donde se suman testimonios y el trabajo de campo: el concepto y la acción. Entre los nombres involicrados se destaca además el de Silvia Soldevilla, la encargada de concretar el rostro y las manos de la virgen.
Alejandro Merola y Tato Borra descubren la obra.
Simbología y sentimientos
Paul Citraro, que además de ideólogo fue el maestro de ceremonias, abrió la puerta para que todos aporten su mirada en torno a la Virgen de los Milagritos, que fue declarada de interés municipal por el Concejo de Venado Tuerto. Por eso estuvieron presentes y sumando su aportes los ediles Pablo Rada y Liliana Rostom. El Ministerio de Cultura de Santa Fe sumó su respaldo a la propuesta.
Bajo la consigna de Open Data, de abrir los conocimientos para que haya más personas con intereses que puedan servirse de ellos, se fue plasmando la idea. “Crear comunidad, crear lazos que incuben comunidades que aborden desafíos y soluciones a conflictos comunes. La cultura es una de las herramientas por antonomasia para desarrollar estas implícitas políticas sociales”, reflexionó Citraro oportunamente.
El gerente comercial de Mecan, Pablo Santos, destacó durante la presentación que “esta virgen es de toda la comunidad, para quien la quiera captar. Ya no es la virgen de Mecan, es de todos”, destacó. Y enseguida tiró el anzuelo: “Esperamos que otras empresas se plieguen a estos proyectos porque enriquecen a la ciudad y generan trabajo al sector de la cultura”.
El padre Martín Cabrera bendice a la Virgen.
María Rosa “Piky” Borra, una de las titulares de Mecan, resaltó que esta obra es también un homenaje a su madre Teresita, férrea devota de la virgen que estaría orgullosa de contar con esta imagen frente al emblemático local. El otro propietario, Pablo “Tato” Borra, puso en valor que “esto se hizo con tornillos y piezas que forman parte de nuestra historia como empresa, podría contar una historia en torno a cada una de las piezas que componen la Virgen de los Milagritos”. Por detrás de ambos, su padre Omar Borra, fundador de la empresa, evitó las palabras pero no pudo disimilar las lágrimas y la emoción.
Piky Borra plasma el sentimiento de la empresa Mecan.
Una buena idea en manos de los intérpretes adecuados, pueden materializar una gran obra. La Virgen de los Milagritos nació en la mente de Paul Citraro, se hizo su lugar en la receptividad y amplitud de la empresa Mecan, y luego un equipo de artistas liderado por Alejandro Merola logró darle forma. Los vecinos de la ciudad que ya empezaron a contemplar y a pedirle milagritos a esa imagen colosal, completan un círculo virtuoso.
Fuente: CiudadanosporMéxico