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Buscando las estrellas: un venadense montó su propio observatorio móvil y convoca a los vecinos para conocer más acerca de la astronomía

(PR/Giuliana Ghignone) El último eclipse mantuvo en vilo a los amantes de la astronomía y en Venado Tuerto, el evento no pasó desapercibido para un grupo de ciudadanos que se reunieron a ver la luna guiados por el creador del primer observatorio de la ciudad, Victor Manuel casadei.

Motivado por su pasión por los astros, este venadense comparte su hobbie con chicos y grandes. Todo empezó hace poco más de dos años cuando en medio de pandemia compró su primer telescopio “tenía algún conocimiento, miraba estrellas y decidí comprar mi primer telescopio. Un pequeño refractor de 600 de distancia focal por 50 mm de diámetro, ahí empecé mirando la eclíptica, la luna, lo más fácil, después ya me largue con los planetas”, cuenta Victor quien lleva adelante esta actividad en los tiempos libres que logra mientras su empresa de limpieza de vidrieras en altura se lo permite.

Fiel a su estilo autodidacta, Victor fue acumulando conocimientos, conociendo experiencias de profesionales y aficionados hasta que decidió dar un paso más y armar su propio observatorio móvil al que llamó Galileo Galilei. “Fui comprando equipamiento, incluso profesionales. La idea es llevarlo a las plazas cuando hay planetas en conjunción, la luna llena y compartirlo con gente de Venado y la región”.
Tanto su Instagram como su facebok son los canales a través de los cuales comparte explicaciones sobre diferentes fenómenos y astrofotografías, entre las que incluye fotos de los astros del cielo, cúmulos globulares, cúmulos abiertos, constelaciones, planetas y fotografías del espacio profundo: galaxias.
“Es mi hobbie, es lastimosamente caro pero de a poco uno se va surtiendo de oculares de mayor calidad, de lentes de mayor calidad. Obviamente los precios son muy altos”, explica aunque consciente que esto puede ser un obstáculo más pero no un impedimento sueña aún más grande y apuesta a la creación de su propio observatorio, alejado de la ciudad “porque en el campo los cielos son otros” y así expandir estos conocimientos.
Por ahora, los encuentros son esporádicos, en las plazas, café de por medio listos para disfrutar de los espectáculos de la naturaleza, conversar y aprender sobre ellos.

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