El concejal Fabián Vernetti remitió a la redacción de PUEBLO Regional On Line un documento donde fija posición en torno a la necesidad de generar, en el ámbito de la ciudad, dos instancias de control de la función pública. El texto plantea: «consideramos necesario contar en nuestra ciudad con un espacio creado para el control de gestión y de la defensa de la transparencia en la función pública.
Si bien la sanción de la Ordenanza Nº 2964 del año 2002, conocida como la de “Ética e idoneidad en la función pública” avanzó en ese rumbo, no es menos cierto que su aplicación así como su reglamentación nunca fue consumada». Vernetti remarca que «el artículo 3º de dicha ordenanza establece que “la aplicación de las normas de esta ordenanza (por la ordenanza Nº 2964) estará a cargo de una Oficina de Control de la Función Pública, que funcionará dentro del ámbito Municipal. La misma estará integrada por un representante del departamento ejecutivo, un integrante del Concejo municipal y un integrante de una Organización No Gubernamental con representación en el Plan general, siempre que esta institución decida hacer uso de la participación. El desempeño será ad honorem”. En el artículo 4º se establecían sus facultades: “la Autoridad de Aplicación dispondrá solo de facultades para exigir el cumplimiento de los requisitos y trámites de la presente ordenanza, y a su vez de comunicar los incumplimientos e irregularidades a la autoridad que corresponda. No posee atribuciones de juzgamiento de ningún orden». Y plantea como sus facultades la de «requerir la colaboración de cualquier organismo o dependencia pública nacional, provincial, municipal o comunal», «reglamentar el procedimiento para la presentación de las declaraciones juradas y demás disposiciones de esta Ordenanza”. Vernetti señala que «se debe dotar a la ciudadanía de reales y efectivas herramientas de intervención en los poderes públicos». Y agrega: «mediante la presente se crea la Oficina Anticorrupción y de Control de Gestión como un espacio institucional encargado de prevenir y denunciar conductas que resulten contrarias a la transparencia, la eficiencia y la eficacia en el funcionamiento del Estado. En dicho espacio, vecinos y agentes públicos pueden realizar denuncias por irregularidades administrativas, malversación de caudales públicos, abusos de poder, falsificación de documentos, lesiones, exacciones ilegales, cohecho, daños y hurto, entre otras figuras delictivas. La tarea de la Oficina será detectar e investigar todo acto sospechado de corrupción, o toda conducta contraria a la ética pública, y en la medida que se detecte el acto, a la sanción administrativa y penal le seguirá la sanción social, de esa manera lograremos sanear nuestras instituciones, al separar de ellas a los corruptos, los cómplices y a los buscadores de privilegios personales». Según el planteo del edil socialista «se propone avanzar sobre la eficiencia en la gestión. Sobradas muestras y experiencia se tiene respecto a la sanción de ordenanzas que no fueron oportunamente vetadas pero que, sin embargo, no han sido aplicadas. Por lo tanto, se debe progresar en este sentido con el objetivo de controlar la aplicación de leyes, decretos, ordenanzas, reglamentos, directivas, planes, programas y proyectos aprobados en los distintos niveles operativos. Logrando además el análisis y diagnóstico de los niveles de eficacia y eficiencia de las unidades orgánicas de la administración municipal». Concluyendo :»un Estado Municipal que carezca de las herramientas, prácticas y mecanismos para el control de los diferentes niveles de gestión es un Estado que crece hacia la ineficiencia».