(PR) Este lunes, el Gobierno de Venado Tuerto, en línea con el gobierno provincial, oficializó el otorgamiento por decreto del aumento salarial que había sido ofrecido en la última ronda de paritarias de abril.
La decisión del gobierno de Leonel Chiarella se tomó en la previa de un paro por 48 horas convocado por la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales (Festram), para este miércoles y jueves.
Con esta medida, el Municipio establece el pago por planilla complementaria de un incremento del 3%, que garantizaría a cada trabajador municipal una suma mínima de 75.000 pesos. El tema de conflicto, es que no se pagaría el 4,5% de diferencia entre lo acordado en la primera paritaria del año y lo que marcó la inflación para el primer trimestre del año. De hecho, en un primer momento, la intención de la administración de Maximiliano Pullaro fue pagar ese porcentaje en negro y por única vez.
Para aclarar la situación ante la sociedad, el secretario general de la Asociación de Trabajadores Municipales (ATM), Juan Arigoni, convocó esta mañana a una conferencia de prensa en la sede gremial.
“Hay mucha información circulando, algunos dijeron que el paro se levantó; por otro lado, los jefes andan diciendo que a quien adhiera a la medida de fuerza, que es un derecho constitucional, le van a descontar el día y el presentismo. Lo cierto es que la medida de fuerza sigue en pie, con un plan de movilización para el día de mañana, miércoles, para lo cual logramos llenar un colectivo de 60 personas para trasladarnos hasta Fray Luis Beltrán donde haremos un corte de ruta, junto a todo el cordón industrial”, señaló Arigoni.
En cuanto a la posibilidad de que el gobierno provincial y municipal descuenten el día de paro y el presentismo, el dirigente endureció la posición: “Te quieren quitar el derecho a todo. Te imponen por decreto un aumento que no fue consensuado en una mesa paritaria. Se levantaron de la mesa, dijeron que no iban a blanquear el 4,5%, que no iban a reconocer el tema de los jubilados, y que las cajas autónomas tendrán que ver cómo discute cada gremio”.
Por otra parte, aclaró que no hay decretada ninguna conciliación obligatoria “porque no le es funcional al gobierno provincial. Esta es una bajada de línea de la provincia, imponiendo lo que ellos quieren, sin mirar las necesidades de los trabajadores. Entienden las necesidades de los trabajadores, pero dicen que pueden ajustarse un poco más, total un poco más de hambre no les viene nada mal”, ironizó Arigoni.
El área de cobertura de la ATM incluye tres municipalidades y 12 comunas, y todas adhieren a la medida de fuerza sin asistencia a los lugares de trabajo, garantizando las guardias mínimas y esenciales, según indicó el gremialista.
Retomando el tema de las paritarias, el titular de la ATM aseguró que “se avecina la destrucción de una discusión democrática, en una mesa de diálogo, para consensuar el salario de los trabajadores. Vamos a volver a la época de (Carlos Saúl) Menem cuando cada gremio arreglaba como podía en un sálvese quien pueda”.
Ante la posibilidad de que el gobierno municipal decida descontar día y presentismo, el sindicalista retrucó: “Si quieren contarnos las costillas, nosotros también se las vamos a contar. Entonces veremos cuál es el estado del parque automotor, trabajaremos el tema de higiene y seguridad, vamos a ver si todos los vehículos están en condiciones, cómo está el transporte urbano, los regadores”.
Para remarcar la importancia de participar del reclamo, Arigoni afirmó que “los valores y la dignidad salen de la casa, entonces no les podemos dejar miedo a nuestros hijos porque el patrón me dijo que me iba a descontar el día. Por un día de trabajo y el presentismo no puedo entregar mi dignidad”.
El dirigente también hizo un más amplio análisis incluyendo las políticas del Gobierno nacional: “Dicen que no pueden pagar porque bajó la coparticipación federal, que bajó la coparticipación de provincia a municipios y comunas, que la gente dejó de pagar impuestos, pero esto lo generaron ustedes con su plan de ajuste y motosierra. La gente prefiere comer antes que pagar la recolección”.
Para cerrar, Arigoni ratificó: “La medida de fuerza sigue en pie, sin asistencia a los lugares de trabajo, garantizando las guardias mínimas y esenciales, y las cuadrillas de emergencia en caso de alguna inclemencia del tiempo”, y cerró con una andanada de calificativos contra la dirigencia política, catalogándolos de “vende patria”, “traidores” y “entregadores”.


