(PR/Norma Migueles) La delegación de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) Venado Tuerto, después de casi dos años y como resultado de mucho esfuerzo, logró tener lo que todas las instituciones ambicionan: el edificio propio. El mismo está ubicado en Juan Bautista Alberdi 239, de diseño amplio y moderno, con recepción, 3 oficinas, SUM para asambleas, sala de reuniones, depósito, cocina y baños.
La delegada, Graciela Vázquez, explicó que aún les quedan algunas cosas por terminar, como por ejemplo un quincho en el patio, sin embargo, acordaron mudarse el año pasado apenas estuvo la estructura habitable porque se les terminaba el contrato de la anterior sede y ya querían mudarse en forma definitiva.
«Tenemos en carpeta varios proyectos, porque queremos que esta sea la casa de los afiliados, que lo usen y disfruten porque es el resultado del esfuerzo de todos, más allá de la actividad gremial que es lo cotidiano», puntualizó.
«Este proyecto de la casa propia lo fuimos gestionando lentamente, antes de la pandemia compramos el terreno. Hace dos años con fondos de la seccional y con un préstamo del Consejo Directivo provincial y lo vamos pagando mensualmente», detalló.
«Uno de nuestros proyectos que nos llena de orgullo es la construcción de viviendas que luego se sortean entre los afiliados, como así también planes de refacción. En estos momentos estamos avanzando en la construcción de seis casas en Venado Tuerto, que se van a emplazar al lado de las cuatro que ya entregamos. Además, construimos en Santa Isabel, Sancti Spíritu, Rufino, Maggiolo, Teodelina, Chañar Ladeado, entre otros», indicó.
Espacio colectivo
«La afiliación a ATE es voluntaria y cuando tenemos la oportunidad de hablar con ellos les explicamos que el sindicato es un espacio colectivo. Los beneficios que se les puede dar, la representación en las negociaciones si no es colectiva, no sirve. En las últimas paritarias el 60 por ciento de los afiliados aceptaron la propuesta salarial, porque el descuento del día pesa en su bolsillo a final de mes», planteó Vázquez.
Luego, evaluó que «no toda nuestra labor se centra en lo salarial, que es importante, pero hay otras solicitudes que se negocian con el Ejecutivo. Por primera vez, luego de muchos años, conseguimos el nuevo agrupamiento para los choferes del 107, a quienes se les reconoce un traspaso de categoría y eso también impacta en lo salarial, como el pase a planta permanente».
«Por otra parte, desde el gremio anualmente entregamos el kit escolar. Los afiliados y su grupo familiar primario tienen sistema de emergencia gratuito y principalmente disponemos de muchos espacios de capacitación», agregó.
Finalmente, Vázquez sostuvo que «no son tiempos fáciles para los empleados estatales, estamos muy estigmatizados, tanto a nivel provincial como nacional. Esto nos pasa cuando hace apenas cuatro años en tiempo de pandemia tuvimos que estar en primera línea y nos aplaudían. Pasada esa etapa nos consideran ‘ñoqui estatal’ que no sirve para nada».