(PUEBLO Regional) Una de las conclusiones a la que se arribó en la reunión ampliada de la Comisión de Salud del Concejo municipal venadense, fue la necesidad de plantear la crisis que está atravesando el sector en la ciudad y la región, con autoridades superiores del PAMI. El temor es que Venado Tuerto llegue a una situación compleja como la que atraviesa la ciudad de Firmat, donde el Sanatorio de la localidad redujo en gran medida las prestaciones brindadas a la obra social de los jubilados y en un momento llegó a cortar el servicio.
En principio se pensaba tratar el asunto con la delegada local de la obra social de los jubilados, Marisa Maldonado, pero como no participó del encuentro al que asistieron directivos de sanatorios y el Hospital Gutiérrez, autoridades municipales y representantes del Círculo Médico, se decidió que el tema deberá ser analizado con cargos superiores del organismo estatal.
“Todos coincidimos y queremos empujar para el mismo lado, por lo cual tendremos que encontrar en autoridades un poco más allá en la UGL 9 (Unidad de Gestión Local) o el PAMI central para que tengamos un interlocutor que pueda dar soluciones a los problemas planteados”, destacó el gerente del Círculo Médico departamental, Ramiro Huber.
“Marisa Maldonado incurrió en una gran contradicción, porque acá lo que hay que hacer es poner las cartas sobre la mesa, decir las cosas como son, y quien tenga responsabilidades técnicas o políticas dar las respuestas a las decisiones tomadas”, afirmó el profesional.
En defensa de la posición de los sanatorios que prestan el servicio de salud a jubilados, el gerente del Círculo Médico planteó que “el prestador privado es una institución que tiene que financiarse, porque si no tiene recursos que le permitan pagar los impuestos, los insumos, el trabajo médico, las enfermeras, es imposible que funcione, porque lo que tiene como ingreso es lo que los financiadores, como en este caso PAMI, le otorga”.
