El contexto económico impulsado por el gobierno nacional ha dejado un saldo negativo, y un incierto inicio de año para muchas familias venadenses, y aún pone en jaque a muchas otras, quienes ante un año sin mucha expectativa temen perder su fuente de trabajo como sucedió con sus compañeros. Un caos que se manifiesta en todo el país, incluso en nuestra propia ciudad.
Los representantes de la UOM señalaron que hubo 180 despidos en los últimos meses. Por su parte, desde el gremio textil habían advertido los riesgos que soportan por la importación indiscriminada y afirmaron que perdieron entre 25 y 50 afiliados. En la UOCRA se había reducido a la mitad la cantidad de los afiliados. También especificaron que muchos empresarios hicieron renunciar a los trabajadores y los dejaron trabajando de manera informal.
En octubre, La CGT Venado Tuerto se sumó a las manifestaciones de preocupación ante la alarmante situación laboral que atraviesa la región. El panorama se describía como transversal a todos los sectores de la economía, aunque hay algunas ramas que padecieron especialmente la combinación de estancamiento e inflación. A partir de un informe de la delegación local de la Unión Obrera Metalúrgica publicado en agosto, se registró que varias empresas locales fueron achicando su plantilla de trabajadores gradualmente.
En junio fueron 80 las bajas y 23 las altas. Adeco Argentina lideró la lista negra con 26 despidos, seguida por Corven Motors con 24. Además, Essen dejó sin trabajo a 10 operarios, Corven Sacif a siete, Industrias Marcelini a siete y dos retiros voluntarios y Tubi Flex SA dio de baja a tres empleados. Por su parte, Sofama acordó el retiro voluntario con seis obreros que se jubilaron. En junio Balanzas Hook registró seis nuevas altas y con cinco le siguieron Tubi Flex SA e Industrias Marcelini. Albert Irons incorporó tres empleados y Stamp Parts Solutions uno.
Según los datos del Observatorio Laboral del Ministerio de Trabajo de la Provincia, en enero había 1454 empresas en Venado Tuerto que generaban 11449 puestos de trabajo, mientras que para julio el número de empresas había trepado 1457 pero la cantidad de empleos se había reducido a 11271.
Entre los sectores más importantes, Agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca tuvo un crecimiento: pasó de 232 empresas con 875 empleos a 241 empresas con 896 empleos. La industria, por su parte, cayó de 164 empresas a 162 y de 3379 puestos de trabajo a 3098. Una caída similar exhibe la construcción: de 57 empresas a 51, y de 503 empleos a 430.
Un dato a analizar es el que registra el comercio al por mayor y menor, que puede ser reflejo de los despidos en otras áreas y la búsqueda de alternativas familiares de aquellos que se quedaron sin fuentes de ingresos, ya que hubo un incremento de negocios de 421 a 429, pero una disminución sensible de los puestos de trabajo: de 2510 en enero a 2489 en julio.