(Pueblo Regional) La violencia familiar no es un delito. Así de simple y contundente. El delito pasa por las lesiones, las amenazas, el hostigamiento. Eso es lo que puede investigar y castigar la Fiscalía. Los hechos de violencia tienen dos derivaciones, la parte civil que incluye la exclusión del hogar, la restricción de acercamiento y todo lo que conlleva la ruptura de la relación, y después está la persecución del delito penal ya sea por lesiones, tentativa de homicidio o amenazas, que es donde trabaja Fiscalía.
Fernanda Vitti, encargada de asesorar y acompañar legalmente a las víctimas de violencia familiar desde el Municipio de Venado Tuerto, explicó a Pueblo Regional que “estos son delitos que, por lo general, tienen muy baja pena, entonces la cuestión de la excarcelación, la libertad condicional, ponen a la mujer en una situación de vulnerabilidad”.
En defensa de la tarea desarrollada por los fiscales, Vitti consideró que “trabajan en base al Código que tenemos, que es el que habilita la detención en tal situación, donde no está prevista la detención no se puede hacer nada”.
Sobre cómo se realiza el control de las perimetrales, la funcionaria explicó que la denuncia la debe realizar la víctima al 911, y en algunas situaciones se ha coordinado la entrega de botones de pánico que los provee el Ministerio de Seguridad provincial por pedido del juzgado interviniente. En Venado Tuerto ya hay un par de accesorios de este tipo entregados.
Con preocupación, Vitti señaló que en la actualidad “hay más casos de violencia familiar. Lo que pasa es que muchas veces los factores de situaciones de violencia son complejos, se sumó la cuestión económica, la falta de trabajo, a las situaciones normales, como los celos, el control, el machismo”.
Por otra parte, el factor económico es uno de los ingredientes que reduce el número de denuncias: “Muchas veces la mujer no quiere denunciar porque el marido es el sostén de la casa, y entonces la pregunta que se hace es ‘qué hago yo si lo denuncio, cómo mantengo a mis hijos’. Es el planteo que las mujeres se hacen muchas veces en lo cotidiano y lo legal no lo resuelve”, acotó la funcionaria.
En este punto vale destacar que desde Nación no hay previstas pensiones ni asistencia económica para víctimas de violencia familiar y para acceder a las que ofrece la provincia “hay que reunir varios requisitos, como intervenciones, denuncias, restricción de acercamiento y demás”. Estas ayudas económicas son “de contención y de ponderamiento. Generalmente deben tener un fin, debe haber un proyecto para salir adelante”, completó Vitti.
