(PR/Santiago Córdoba-Pablo Salinas) No es nada nuevo que el cálculo de tarifas, sobre todo cuando la prestataria del servicio es una empresa contratada, genera un amplio debate y largos análisis con expertos y técnicos.
En Venado Tuerto están los claros ejemplos de las cooperativas de Obras Sanitarias (COS) y de Electricidad (CEVT), cuyos contratos de concesión demandaron años de trabajo.
En las últimas semanas el cálculo tarifario volvió a ser tema de debate por la situación de la COS y sus dificultades para que cierren los números.
En este nuevo capítulo uno de los protagonistas fue el concejal socialista Leo Calaianov, que opinó que habría que reevaluar la conveniencia de mantener la fórmula aprobada cuando se renovó el contrato de la COS.
Uno de los que llegó a interpretar y aplicar esa planilla de cálculo fue el concejal mandato cumplido Roberto “Tío” Meier, del movimiento Pueblo.
En diálogo con Pueblo Regional, el ex legislador explicó el por qué de esa fórmula: “Este mecanismo de cálculo forma parte de lo que fue el contrato con la Cooperativa de Obras Sanitarias, que tenía una base que había realizado el contador Raúl Sandomeni tomando como eje los contratos que había hecho Menem (Carlos Saúl, ex presidente de la Nación)”.
En la misma línea detalló que el cálculo tiene dos partes, “por un lado se evalúa qué incidencia tiene cada rubro, obras y servicios. El de servicios además está dividido en muchos subrubros y había que hacer un trabajo muy prolijo para determinar cuál era el porcentaje que incidía. Después el porcentaje de cada uno de esos subrubros había que ver cómo se tomaba desde el Indec (Instituto Nacional de Estadística y Censos) para determinar cuál era el aumento”.
Por último había que hacer un análisis general de todos estos datos para determinar el precio de la tarifa.
Por otra parte, Meier agregó que se debía conformar una comisión de seguimiento de los servicios concesionados, “cosa en la que estamos en falta porque todavía no se constituyó. Hasta que se constituyera esa comisión fuimos nombrados yo por el Concejo y el ingeniero Daniel Dabove por el Ejecutivo para hacer el control”.
La tarea que tenían Meier y Dabove era controlar el informe que cada mes elaboraba el contador Sandomeni, que era la base de todo el esquema tarifario de la COS.
El abuelo se murió
Una curiosa y tragicómica anécdota contó el ex legislador sobre el contador Sandomeni. “Durante un tiempo, y por insistencia de la Cooperativa que pedía un ajuste de tarifas, nos pusimos a buscar al contador Sandomeni para que actualizara el informe, que era el único que lo hacía. Como los informes no llegaban Dabove lo llamó y atendió el teléfono un chico que le dijo que ‘el abuelo se murió’, con lo cual tomamos con Dabove la responsabilidad de hacer ese trabajo”.
Rememorando los primeros años de concesión, el ex edil puntualizó que “el costo del agua potable obtenida mediante el sistema de ósmosis inversa era muy caro, no había casi agua por este método en la Provincia, y por eso hicimos lo de la canilla única”.
Con el paso del tiempo este método se “popularizó” y se comenzaron a conseguir filtros fabricados en Argentina y esta variante que tenía importante incidencia en la tarifa se comenzó a abaratar. Según Meier cuando plantearon la necesidad de redistribuir los índices para variar la tarifa total hubo un rechazo desde la COS y ese valor no se pudo modificar.
Tarifa de cloacas
Para el caso del cálculo de la tarifa de cloacas, se toma como base la cantidad de elementos que hay en la vivienda. “Si tenes un lavarropas automático se considera que sos pudiente y entonces tiene un valor más alto tu tarifa. Ahora, que en casi todas las casas hay lavarropas automáticos, todas tienen tarifas altas, y las casas más viejas, que no tenían esos elementos y nunca se actualizó la información, tienen una tarifa más baja”, describió el ingeniero.
La propuesta que impulsó Meier en su momento es copiar el modelo de Rosario donde se calcula por metro cuadrado de vivienda, “ese punto es necesario cambiarlo”.
Para resumir, el ex edil consideró que “son dos cosas que habría que cambiar de la vieja fórmula de cálculo: el tema de las cloacas, y el índice K del agua potable, porque la incidencia de ese número sobre el total ahora es menor, porque son más baratas las membranas, y entonces el costo de producir agua potable no es el mismo que cuando hicimos aquél cálculo”.