El primer tiempo arrancó con el conjunto local yendo a buscar el gol sabiendo que el único resultado que le servía para no depender de nadie era ganar. Así fue como a los 8 minutos, Ramiro Boccalini arrancó por izquierda tirando la diagonal hacia adentro y sacó el remate cruzado para poner el 1 a 0.
Tras el gol, Peñarol generó un par de situaciones claras como para igualar el partido pero, primero a los 11 minutos con un remate que salió cerca del segundo palo y luego a los 13′ por un mano a mano tapado por Ramiro Arcondo, Mauro Barbich desperdició dos goles.
Ezequiel Torres, que unos minutos más tarde saldría lesionado, exigía a Arcondo que respondía. Unos minutos más tarde el ingresado por Torres, Brian Machin, también se lo perdía.
En el comienzo de la segunda etapa, Peñarol llegó dos veces con peligro, pero Arcondo brindaba solvencia.
De ahí en más el partido se fue haciendo más desprolijo y a los 20 minutos, el árbitro Segovia ignoró un claro penal para el local que podría haber cambiado el rumbo del partido. La desesperación de Peñarol por empatarlo, también era desesperación para el Trico que soñaba con cerrarlo.
Llegó el final y el alivio para un Newbery que logró el objetivo de meterse entre los mejores ocho del torneo y ahora tendrá que ir con el mejor de la fase regular, Juventud Pueyrredón.
