(Por Gustavo Castro) Dirigentes cercanos a Lifschitz aseguraron que el gobierno provincial (de Omar Perotti) adquirió en forma directa 220 móviles policiales “sólo para evitar controles de la licitación pública”. Pero durante las gestiones del Frente Progresista se utilizó ese mecanismo para comprar casi 1.000 automotores de esas características. En más de la mitad de las operaciones resultó beneficiada la concesionaria que ahora se cuestiona.
El viernes de la semana pasada, la diputada provincial socialista Clara García twitteó: “Después de gobernar ocho meses, hay justificativo para hacer una compra directa por casi 500 millones de pesos? De ninguna manera. Ni necesidad ni urgencia. Solo (sic) evitar los controles de la licitación pública. Así no!”. La legisladora, que además es la esposa del ex gobernador Miguel Lifschitz, se refirió de esa manera a la adquisición de 220 camionetas para la policía. La denuncia pública fue compartida por militantes, dirigentes, periodistas y ex funcionarios del PS, quienes hicieron alusión también a la presunta amistad personal de Omar Perotti con Marcos Valentino, propietario de la concesionaria Escobar, que fue la empresa ganadora.
Ante la gravedad de las acusaciones, Diario Santa Fe resolvió indagar si este tipo de compras es inédito o poco habitual, sobre todo teniendo en cuenta que aquí se revelaron en numerosas oportunidades adquisiciones o contrataciones con similar modalidad durante los gobiernos del Frente Progresista, como se puede leer en las notas relacionadas.
Según documentación oficial a la que accedió este portal, entre 2013 y 2017 se realizaron 17 compras directas de camionetas para la policía, a través del uso intensivo de la emergencia en Seguridad. En 9 de ellas, es decir más de la mitad, fue adjudicado el negocio de manera total o parcial a Escobar, quien resultó así ser la firma más beneficiada.
Siempre de acuerdo a los decretos firmados por los entonces gobernadores Antonio Bonfatti y Miguel Lifschitz, 952 móviles de esas características fueron adquiridos con ese procedimiento. De ellos, 490 (el 51,5%) se compraron en apenas dos operaciones ejecutadas con sólo 6 meses de diferencia entre sí: 240 el 1 de septiembre de 2016 y 250 el 29 de marzo de 2017.
Hasta acá, la información. Las interpretaciones parecen sobrar.