El Transporte Urbano de Pasajeros (TUP) está exhibiendo un mayor uso por parte de los vecinos de Venado Tuerto en el presente año, de acuerdo a las cifras oficiales del gobierno de la ciudad y el servicio de SUBE. Durante los primeros ocho meses del 2023 las cifras se elevaron considerablemente en relación a 2022 y 2021, aunque todavía están por debajo de 2018, el año con mayor demanda del servicio, al menos de los que se tiene registros formales.
Venado24 accedió a las estadísticas que demuestran que agosto fue el mes con mayor cantidad de cortes de boleto, con un total de 39.269, mientras que las proyecciones de septiembre ya permitían vislumbrar que la cifra sería superada.
Durante este año, como es lógico, el mes con menor demanda del TUP fue enero con casi 21 mil viajes, cifra que creció por encima de los 30 mil en marzo y se mantuvo similar en los meses siguientes. En junio hubo un salto por encima de los 34 mil, bajando en julio (por las vacaciones de invierno) y volviendo a despegar en agosto y septiembre.
Los motivos para esta mayor demanda del TUP son varios: el primero está relacionado a la cuestión económica, dado que el boleto se mantiene en 10 pesos, una cifra casi simbólica que está vigente desde 2018. Con un servicio que está subsidiado casi en su totalidad, en realidad se mantiene el cobro del boleto porque eso permite acceder a los aportes de Nación y Provincia para el sostenimiento del transporte público.
Desde el inicio de la gestión de Leonel Chiarella (diciembre de 2019) se apostó a “ordenar” las prestaciones del TUP. Se aprovechó la interrupción forzosa del servicio por la pandemia (desde marzo de 2020) para intervenir y reparar los colectivos que presentaban muchas dificultades. Entre otras cuestiones, se buscó garantizar que queden registrados los viajes de todos los pasajeros (aún aquellos que están exentos del pago, como los estudiantes y jubilados) y a través del GPS del sistema SUBE se pudieron constatar los kilómetros recorridos y las frecuencias. También se realizó la VTV, que tenían vencida desde 2016, según se informó en su momento.
Tendencia en alza
La prestación del servicio recién se retomó (tímidamente) en diciembre de aquel 2020 y las cifras de 2021 estuvieron muy por debajo de lo que marcaban los antecedentes más cercanos, con un promedio de 12.700 viajes mensuales.
A partir del año pasado hubo un crecimiento acentuado en el uso de los colectivos, del orden del 90 por ciento, con un promedio de 24 mil viajes mensuales, llegando a un pico 30.200 en septiembre. La tendencia se acentuó durante el corriente año, y en los primeros ocho meses el promedio ya escaló a 29.200 viajes mensuales.
De todos modos, todavía no se llegó a las cifras del 2018, en la gestión de José Freyre, cuando el promedio mensual de boletos llegó a 39 mil, con más de 46 mil viajes en septiembre. Una de las explicaciones puede estar dada en la incorporación de nuevos colectivos que se hizo en aquel año, que fue la última tanda que se sumó al TUP.
De hecho, hoy el servicio cuenta con ocho vehículos distribuidos en cuatro líneas, que se reducen a la mitad los sábados y feriados. Durante la reciente campaña electoral, el intendente Leonel Chiarella declaró que hay una necesidad de invertir en el transporte urbano de pasajeros, algo que ratificó en una entrevista con este medio luego de su aplastante triunfo electoral: “El Transporte Urbano de Pasajeros tenemos que ponerlo en prioridad”, sentenció el mandatario.
Subsidios recibidos
Aquellas cifras de 2018 no se sostuvieron al año siguiente, en el final de la gestión de Freyre, donde la cantidad de boletos registrados cayó a menos de la mitad: “Nos encontramos un servicio con muchas dificultades, sin control ni inspectores”, expuso el subsecretario de Movilidad, Eugenio Bernabei, quien hoy está a cargo del sistema.
“El ordenamiento que pudimos realizar fue fundamental para que el Municipio pueda recibir los subsidios de Nación y Provincia, que hoy ascienden a unos 12 millones de pesos mensuales, que nos permiten cubrir aproximadamente el 60 por ciento del costo total del servicio”, agregó el funcionario, aclarando que estos porcentajes son muy variables en el actual proceso inflacionario.
Estos subsidios se pagan en función del cumplimiento del servicio declarado, que se mide en un GPS controlado por el servicio SUBE, además de los viajes registrados.
“Contar con todos estos datos nos permite tener un panorama claro del servicio que se presta para trabajar en mejoras, que van más allá de la incorporación de nuevos colectivos, porque estamos estudiando un cambio integral con la mejora de los recorridos”, completó.
Fuente: Venado 24.