(PR/NormaMigueles) Fabiana Morón y Adrián del Pino, empiezan a cerrar una etapa en sus vidas, pero seguramente las heridas seguirán siendo muy dolorosas tras el homicidio de Julieta, una bella jovencita de 19 años de edad, quien fue ultimada por su ex novio cuando volvía al hogar en horas de la noche luego de trabajar todo el día en la localidad de Beravebú. Hecho ocurrido el 25 de julio de 2020.
El femicida, Cristian Romero, fue condenado en procedimiento abreviado a la inédita pena de cadena perpetua, y para la familia Del Pino se hizo justicia y la extenuante lucha de dos años tuvo el final deseado.
Desde muy temprano la familia de Julieta, llego a los tribunales de Melincué para asistir a la ratificación del acuerdo abreviado, homologado por los jueces Adrián Godoy, Lorena Garini y Benjamín Revori. Solo los Del Pino, el condenado , jueces, personal de OGJ y fiscalía estuvieron en la audiencia.
Tras conocer el resultado Fabiana pudo dar riendo suelta a sus emociones y tensiones, ya que hasta ese momento no se sabía si el tribunal aprobaría el acuerdo. Ella quería estar presente para mirar a los ojos al femicida y que le diera una explicación. Esto no lo logró. Romero nunca la miró, ni pidió perdón.
“Son muchas emociones, mi lucha no fue en vano, lo logramos junto con los fiscales. Juli ahora descansa en paz, se que ella no va a volver del cementerio, pero siento que estará orgullosa porque lo logramos. Él va a estar en prisión perpetua”, sostuvo.
Respecto al futuro Fabiana aseguró, “Juli me dejó una bandera muy grande de lucha y sigo para que esto cambie, y como lo hice por ella voy a seguir apoyando a las mamás que pasan por lo mismo. Se trata de acompañar, de escuchar y tomar el lugar del otro y esto es lo que hacemos en el grupo Atravesados por el Femicidio”, resumió.
