(PR/Pablo Salinas) El caso de gripe aviar detectado en la vecina ciudad de Villa Cañás encendió las alarmas de la comunidad, que todavía no termina de recuperarse de la última pandemia que golpeó al mundo.
Al frente de todas las acciones de control e investigación de este mal está el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), organismo que en el orden local es dirigido por el médico veterinario Marcelo Astigarraga.
El profesional comenzó por explicar que “Argentina hasta la semana pasada era uno de los pocos países en el mundo libre de influenza aviar, y a partir de alertas que se venían generando en toda Sudamérica, el jueves pasado se reportó un primer caso en Jujuy, en la frontera norte con Bolivia”.
En diálogo con VerTV y Pueblo Regional, Astigarraga describió que en estos momentos se está produciendo “una migración natural de las aves desde el hemisferio norte que transportan el virus sin manifestar ningún signo, porque algunas son asintomáticas y en otras produce una gripe, postración y muerte”.
A partir del primer caso jujeño se fueron reportando otros, hasta que el viernes “un productor de Villa Cañás informó a la oficina de Senasa de esa localidad sobre una mortandad de aves en su predio, una granja de traspatio, o gallinero de fondo de patio, donde tenía gallinas, patos y pavos. Comenzaron a morirse las gallinas, que son las más susceptibles”, graficó el médico veterinario.
El mismo viernes personal de Senasa se presentó en el predio para tomar muestras de los patos domésticos y gallinas, y el domingo el laboratorio del organismo constató que eran positivas para influenza aviar tipo A, subtipo H5, que es considerada altamente patógena y genera gran mortandad de aves.
Conocida la confirmación se inició todo un operativo sanitario, el predio quedó interdicto y con veterinarios de Senasa se hizo un rastrillaje en el área lindera al foco.
El especialista también ofreció algunos detalles sobre las medidas que se deben tomar para evitar el contagio, dado que presumiblemente el virus llegó a través del contacto de las aves del gallinero con aves silvestres.
“A los productores de aves, ante la presencia de animales con signos de depresión, postración, que dejan de comer, tomar agua y poner huevos y luego mueren, reporten el hecho ante cualquier oficina local de Senasa”, apuntó Astigarraga.
El funcionario también recomendó no manipular aves que tengan alguno de estos síntomas, y apuntó que “si bien todos los tipos de influenza tienen una especificidad de especie, esporádicamente ha sucedido que una gripe aviar se ha convertido en zoonosis. Es decir que ese virus podría pasar al humano”.
De todas formas, aclaró que se realizó el correspondiente contacto con salud pública provincial y se está haciendo un seguimiento de las personas que estuvieron en contacto con las aves vivas que habitan en la granja de Villa Cañás, para estar atentos a cualquier sintomatología.
Para cerrar el veterinario planteó que “la emergencia sanitaria por influenza aviar ya está declarada por una resolución de Senasa y están en aviso los puestos de control fronterizos y todos los efectores de salud provinciales a través del Ministerio de Salud de la Nación”.