(PR-Norma Migueles) Francina Arroyo, una hermosa muchacha de 25 años de edad, no pensó en ningún momento que la del domingo era la última noche de su joven vida, sino no hubiera ido a esa casa, donde una discusión desencadenó en violencia y minutos más tarde una certera puñalada abrió un canal en su cuello por donde ingresó la oscuridad fatal.
La crónica policial relata que en la noche del domingo en la localidad de Teodelina, Francina ingresó al Hospital con una herida de arma banca en el cuello. Dos muchachos fueron con ella hasta el nosocomio, cuando llegó la policía, dijeron que el autor del ataque había sido un menor.
Sin embargo este testimonio fue posteriormente descartado porque una joven de 22 años se presentó en sede policial y manifestó que era la autora de la agresión. Una hora más tarde Francina falleció.
Mientras tanto el fiscal ordenó al personal de AIC hacerse presente en la vivienda donde se produjeron los hechos, porque muchas cosas no cerraban y los testigos seguían apuntando al joven de 15 años de edad.
En horas de la mañana la mirada de los investigadores se trasladó a la ciudad de Villa Cañás, allí vive la madre del chico y de la joven que se presentó como agresora. El chico presentaba golpes y cortaduras y al aparecer ropa muy ensangrentada. Sangre que por otra parte no fue hallada en la vestimenta de su hermana.
Por orden del Juzgado de Menores el menor fue imputado por homicidio y permanece detenido en el Samco de Villa Cañas recuperándose de los golpes recibidos.
El origen de la gresca, será determinado por las autoridades en las próximas horas como así también la responsabilidad que le compete a cada uno de los distintos actores que estuvieron esa noche. De hecho en esta causa intervienen Fiscalía , Juzgado de Menores y Juzgado Federal de Venado Tuerto porque, como suele suceder en estos casos de tanta violencia, la droga también es actora