(PR/Pablo Salinas) Este jueves y viernes, de no mediar una solución de último momento, en todas las localidades de la provincia de Santa Fe se llevará adelante un paro de actividades de 48 horas (jueves y viernes) impulsado por la Federación Santafesina de Trabajadores Municipales (Festram) ante la falta de coincidencias entre la dirigencia gremial y las autoridades en la mesa paritaria.
Según informó a VerTV el secretario general de la Asociación de Trabajadores Municipales (ATM) de Venado Tuerto y la región, Juan Arigoni, la medida de fuerza es consecuencia de no llegar a un acuerdo en el tema de “asignaciones familiares y en paralelo a eso venimos llevando adelante una serie de reclamos por la obra social IAPOS. Finalmente estuvimos reunidos el viernes, pero no fue una reunión porque en el anterior encuentro dijeron que iban a traer una propuesta para evaluar, pero no llevaron nada”, se quejó el dirigente.
La única respuesta que presentaron a los gremialistas fue que “ellos (los funcionarios) no están facultados para llevar adelante una negociación”, y en este marco Arigoni consideró que “la decisión final la tiene que tomar el gobernador”, aunque aclaró que no se trata de un reclamo puntual a Omar Perotti, sino que el jefe del Ejecutivo provincial, sea del color político que sea, es el encargado de terciar en este tipo de disputas.
“Si el gobernador saca por decreto el tema del aumento de las asignaciones ni siquiera lo tiene que pagar la Provincia, porque eso le corresponde a los municipios y comunas. Pero acá hay una disputa, una mezquindad política, que prevalece por sobre las necesidades de los trabajadores”, planteó el gremialista, y aseguró que “las asignaciones familiares que se están pagando son irrisorias, por ejemplo 510 pesos de ayuda escolar o 120 pesos por cónyuge”.
En este contexto el sindicalista recordó que, a las 48 horas de paro del jueves y viernes, se suman el fin de semana, más el feriado del lunes 1 de mayo por el Día del Trabajador, con lo cual serán cinco días con servicios reducidos.
“Nosotros queremos una solución, una propuesta”, afirmó Arigoni y comentó que para hoy está previsto un nuevo encuentro en el que se presentaría una alternativa para evitar que se llegue a la protesta, por lo cual las próximas horas serán definitorias para saber cómo se resentirán los servicios a partir del jueves.
Para cerrar Arigoni planteó un panorama preocupante: “Ya nos han sacado todo, es una desidia total. Hoy el problema es ver qué vas a comer al mediodía y que plato de comida le vas a dar a la noche a tus hijos. La situación es grave, es alarmante y los trabajadores han perdido el miedo, y eso es muy peligroso porque el trabajador sin miedo afronta lo que sea”.