(PR) En la mañana de hoy estuvieron reunidos en el edificio de Vía y Obras, los concejales, miembros del Ejecutivo municipal y la defensora general de Venado Tuerto, Gabriela del Castillo, para analizar la situación de los geriátricos y hogares de ancianos que trabajan en la ciudad.
Al término del encuentro, Del Castillo informó que “hace bastante tiempo que venimos trabajando con la temática de los adultos mayores y mi función dentro de esta comisión es garantizar sus derechos. Una de las cuestiones más importantes que está en vista hoy es la falta de lugares habilitados, donde se los trate adecuadamente, y donde se les ofrezcan condiciones dignas de vida”.
Uno de los temas tratados en la reunión estuvo orientado a “evaluar la ordenanza vigente y promover una categoría intermedia. La ordenanza actual marca los estándares que se necesitan para una habilitación provincial, y muchos de los lugares no lo estarían cumpliendo, y por eso no están habilitados”.
La funcionaria sostuvo que “el Municipio tiene la potestad de controlar y yo también tengo ese poder. Los controles se están realizando, pero la idea no es sancionar, sino acompañar. No podemos hoy, con la población de adultos mayores existente, cerrar los lugares que no están habilitados porque esta gente quedaría en la calle”.
Del Castillo subrayó que “esta es una problemática social, por eso acompañamos a cada uno de los hogares, junto con los abuelos y las familias, para que puedan vivir de una mejor manera”.
Para avanzar en el tema, se dio ingreso a un proyecto de ordenanza proponiendo la creación de una nueva categoría de estos espacios de cuidado, y además se apuntará a la capacitación de las personas que trabajan en los hogares.
En cuanto a quién tiene a su cargo los controles de estos lugares, la funcionaria remarcó que “es responsabilidad de los poderes ejecutivos municipal y provincial”.
Por otra parte, precisó que “tenemos 340 abuelos registrados como alojados en Venado Tuerto, pero esta es una problemática de la región, porque en muchos hogares tenemos personas de localidades cercanas, como Teodelina, Villa Cañás, Murphy y Sancti Spíritu”.
Uno de los problemas que se presenta en la prestación de este servicios son los costos, que “en muchos casos son solventados por el propio abuelo o su familia, pero la mayoría de los adultos mayores cuenta con obra social, como PAMI, IAPOS, y estas obras sociales proveen de hogares, pero las instituciones locales, al no estar habilitadas, no pueden requerir el pago de este canon. Por eso queremos acompañar para que las habilitaciones, tanto municipales como provinciales, se terminen efectivizando y se pueda solucionar esta cuestión económica”, concluyó Del Castillo.