La directora de Tránsito, Natalia Jaureguizahar, hizo referencia a la aprobación de la ordenanza de tolerancia cero para los controles de alcoholemia en la ciudad de Santa Fe y a la posibilidad de replicar esa normativa en Venado Tuerto.
En primer término, aclaró que “nosotros nos regimos por la Ley Nacional del Tránsito, que tiene una tolerancia de 0.50 (m/l) para los autos y de 0.20 para las motos. Y por ley provincial también, salvo esta excepción de la ciudad de Santa Fe, que está en todo su derecho”.
La funcionaria, en diálogo con Canal 12, se mostró proclive a sancionar con dureza a “aquellos que van al volante muy alcoholizados, de un gramo para arriba, y hasta incluso transformarlo en un delito, parecido a la Ley Emilia en Chile”, sin poner tanto el acento en los que tienen un límite bajo de alcohol en sangre, conforme lo tolerado por ley.
“Siempre el consejo en seguridad es alcohol cero a la hora de conducir, pero en este caso creo que vamos a empezar a perseguir o a gastar recursos en controlar a un sector que no es el que está generando los grandes conflictos (en el tránsito), cuando debemos apuntar a una solución más de fondo, que es sacar de la calle al que conduce alcoholizado, por encima de 0.50 e incluso por encima de un gramo, que provoca siniestros y hasta muertes”, aseveró.
En el mismo sentido, instó a “comenzar a trabajar la figura de los delitos viales, ya no una contravención”, con una pena máxima que podría ser la cárcel; más allá de sanciones convencionales como la quita del carné o la inhabilitación para conducir.
Jaureguizahar indicó que “los fines de semana y en general conductores jóvenes suelen provocar diversos episodios, muchos de ellos con resultados luctuosos; pero no es Venado una ciudad que se destaca por eso, gracias a una continuidad de nuestras políticas de control de alcoholemia”, recordando luego décadas pasadas con mayores niveles de siniestralidad, en particular sobre las rutas y cercanías a boliches.
“Hemos logrado aplacar esta situación, pero la solución definitiva se logrará con una toma real de conciencia, cuando entendamos que tenemos que utilizar figuras como la del conductor designado, o algún otro medio de transporte, como taxis y remises, y no conducir si no estamos en condiciones de hacerlo”, sostuvo la directora de Tránsito sobre estos avances culturales.
Finalmente, subrayó que “en este tema hay muchas cuestiones técnicas a tener en cuenta, como el funcionamiento y el margen de error de los aparatos de medición; a mí sinceramente me parece más demagógica que efectiva una medida de este tipo, y por eso buscaría el camino de endurecer las penas a quienes causen inconvenientes graves en el tránsito”.