El fin de semana alrededor de 60 integrantes de Ciudad Futura, un partido político originario de Rosario que desembarcó hace poco tiempo en la ciudad, se juntaron con sus compañeros de Venado Tuerto en el marco de las jornadas solidarias de trabajo voluntario. El encuentro fue en el asentamiento Villa Moisés, uno de los sectores más vulnerables de la ciudad, territorio en el que la agrupación viene trabajando hace más de un año, de manera autogestiva y colectiva.
Franco Parola es uno de los militantes locales que conversó con PUEBLO Regional sobre esta iniciativa venadense. “Estuvimos en una jornada solidaria que es una iniciativa de Ciudad Futura para pensarnos como movimiento y poner en hacer delante de todo”, explicó, y detalló que “para nuestro tipo de construcción no solamente importa hablar de política y estar en las instituciones, sino que es importante estar en los territorios”.
Desde hace un año esta organización viene trabajando en barrio Moisés y planificando una escuela llamada “La Común” que “no solo es un espacio de reunión, sino que hay un merendero, pero también intentamos potenciar el lugar y ofrecer algo más, por eso cerramos con bioconstrucción y pudimos ver que estaban las condiciones dadas para seguir haciendo cosas y generar un lugar distinto”.
“La bioconstrucción es un método sustentable y a mano, y la intención es pensar una solución a la problemática de la vivienda, que una vez que se vea este tipo de construcción pueda ser imitada, queremos demostrar que se puede, organizados y con construcción colectiva, es posible”, apunta Parola.
Por otra parte, en relación a la participación de la gente del barrio, Parola subraya que la gente tiene “muchas ganas de empoderarse y protagonizar estos procesos”. Además, se realizó una limpieza del corazón de manzana desplazando un basural e instalando una canchita y una huerta. “Hubo gente que ese día se fue a laburar desde muy temprano, es un barrio donde la gente trabaja muchísimo, y cuando volvieron tenían en el patio de su casa una huerta”, sintetiza.
«La situación es difícil, hay una lucha por la tierra muy fuerte. Nosotros estamos construyendo en un espacio de un compañero. Nos cedieron el patio que es donde estaba el merendero para que funcione una escuela, un taller de oficio y un bachillerato popular», apunta Parola, y finaliza: «la gente que está ahí es de Venado Tuerto, hay que desmitifcar muchas cosas que se dicen, y ellos quieren poder comprar sus terrenos, hay mucha dignidad».