(PR/Norma Migueles) En una audiencia realizada este miércoles en los tribunales de Venado Tuerto, ante la Cámara de Apelaciones en lo Penal, la defensa del religioso Pedro Ortiz y Hontoria, solicitó que el condenado continúe el proceso en libertad.
Los abogados Arsenio Domínguez y José Marchisio consideraron que no están abastecidos los peligros de fuga manifestados por la fiscal de la causa, Florencia Schiappa Pietra, ya que su defendido estuvo siempre a derecho y también planteó el constitucional derecho de ser considerado inocente hasta que la condena quede firme.
El defensor detalló en forma abundante como Ortiz y Hontoria, desde que se lo imputó, cumplió con lo dispuesto por la fiscalía: abandonar su cargo, no contactarse con niños, concurrir a firmar a la comisaría del lugar en los términos propuestos y contaba con un guardador que cada quince días contaba sobre sus movimientos, ya que hasta el juicio estaba domiciliado en una vivienda proporcionada por la congregación religiosa a la que pertenece en la ciudad de Buenos Aires. En consecuencia, propuso continuar con las mismas normas de conducta y, de ser necesario, fijar una caución, no ofreciendo monto.
Por su parte, la fiscal Schiappa Pietra se opuso al beneficio indicando que este tipo de casos se analizan teniendo en cuenta el bloque constitucional de género y niñez.
Luego, advirtió que el religioso puede fugarse, no sólo por el monto de la pena, sino porque no tiene arraigo, su familia vive en España y tiene la ciudadanía de ese país. También, remarcó que cuando intentó viajar en 2024 informó al Ministerio de Salud de ese país «por si se enfermaba».
«El único arraigo que tiene es la Congregación a la que pertenece y que sigue descreyendo del testimonio de la víctima, una institución a la que concurren niños y que protege su imagen y nada va a hacer para evitar que el condenado se fugue», sostuvo. «La Congregación no es garantía de nada, desde el inicio defendieron a Pedro y no a las niñas», criticó.
En tanto, Ana Regidor, representante de la querella, señaló que la causa afecta a cuatro víctimas que tienen triple vulnerabilidad: son mujeres, niñas y sufrieron abuso sexual.
«No tenemos que acreditar el peligro de fuga, una condena alta incrementa la presunción de fuga. Mas allá de que no está firme la condena, el proceso tiene que ser protegido y que se cumpla el fin, que es que se cumpla la pena impuesta», sostuvo Regidor.
Durante los planteos, se trajo nuevamente a colación el tema de la interna en la Iglesia, que fue deslizado tanto por el condenado como por los testigos de la Congregación apuntando a supuestas desavenencias con el párroco de Cáritas Martín Cabrera y la asistente social Andrea Belligotti quienes iniciaron una investigación interna por los abusos sufridos por una de las niñas, a pedido de su madre.
Pedro Ortiz y Hontoria, ex director de nivel Primario del Colegio Sagrado Corazón de Venado Tuerto fue condenado por un tribunal, tras transitar el juicio oral y público, a 15 años de prisión por tres hechos de abuso sexual agravado y uno de abuso sexual ultrajante doblemente agravado.
