ESCUCHA RADIO MIL9
ESCUCHA RADIO MIL9
miércoles 11 septiembre 2024
13.8 C
Venado Tuerto
InicioVenado TuertoLa otra cuarentena: ¿Cómo viven los habitantes del barrio Villa Moisés?

La otra cuarentena: ¿Cómo viven los habitantes del barrio Villa Moisés?

La cuarentena no es para todos igual. En los barrios periféricos, los niveles de aislamiento dependen de las condiciones en las que pueden desarrollarlo. El periodista Santiago Córdoba, de VerTV, recorrió el barrio Villa Moisés para mostrar como se vive este periodo tan particular en uno de los barrios que cobró notoriedad pública a partir de las consecuencias que produjeron las últimas inundaciones.

Entre los testimonios y las imágenes recogidas, se observa que la circulación por las calles es mayor que en el centro de la ciudad, donde existen otras comodidades para pasar el periodo de aislamiento social obligatorio. “Con el tema de la comida se nos dificulta porque no tenemos ingresos y la mayoría tenemos trabajos informales”, comenta Fabricio, uno de los habitantes de ese sector de la ciudad.

Rodeado por chicos que juegan al aire libre, el joven residente de Villa Moisés relata una realidad completamente distinta a la que atraviesa el resto de los venadenses. “Recibimos ayuda, más que nada, del esfuerzo de los vecinos que reparten leche a los chicos, pero así se nos hace muy difícil”, indica.

En cuanto a la previsión de la salud, Fabricio explica que no se le proveyeron ningún insumo de prevención ni tampoco cuentan con agua potable. Cuentan solo con una canilla para cuatro barrios, a la cual se complica el acceso los días que llueve. “Es difícil tener a los chicos adentro, porque quieren comer y no le podemos dar nada, entonces el esparcimiento ayuda a combatir el hambre que hay”, agrega Fabricio.

Entre las necesidades, destaca los barbijos, el cloro y demás artículos de limpieza e higiene, además de contar con luz, ya que para la iluminación tratan de resolverla entre los vecinos.

Además, Fabricio expresa un panorama sombrío en lo referido a las pocas posibilidades de ganarse unos pesos para sobrellevar la diaria. “El trabajo se cortó todo, la fuerza policial viene y dispara tiros, se escuchan balazos a la noche porque tal vez un chico sale a buscar algún aluminio o un cobre tirado en la calle”, detalla.

Otra de las habitantes del barrio, Fernanda, cuenta que consiguió el bolsón de productos que “dura solo tres días” y lo recibe mensualmente. Dice que desde hace una semana comen solo tortafritas, ya que ella no cobra ni siquiera la Asignación Universal por Hijo. Tampoco tiene trabajo, ya que tiene que cuidar a los hijos. “A veces comemos al mediodía un guiso y guardamos un poco para la beba. Nosotros tomamos mates con tortafritas o un pedacito de pan”, describe.

Ocasionalmente hay una vecina que le paga 200 pesos para lavar la ropa y eso le sirve para conseguir comida unos días más. Fernanda dice que le da miedo el problema de la limpieza y comenta que a la nena más chica la tienen que mantener encerrada. Como no tiene camas, los chicos duermen en tarimas y ella en el piso. “Como esta ahora, no sé hasta cuando podemos aguantar”, afirma.

El problema de las penosas condiciones sociosanitarias en que se desarrolló Villa Moisés en los últimos años constituye una de las materias pendientes del estado municipal, que no tuvo músculo suficiente ni decisión política para reaccionar a tiempo cuando este sector de la ciudad comenzó a desarrollarse de manera exponencial. Hoy la situación es mucho más compleja, por la cantidad de familias involucradas, y dependerá de la gestión de soluciones a nivel local pero resultará clave del aporte de nación y provincia avanzar con una propuesta abarcativa de toda la complejidad del tema.

Al 10 de enero de 2019 había en barrio Villa Moisés unas 241 personas y el 53% de los habitantes eran menores. Para este año (2020) la cantidad había trepado a 446 personas. Es decir, en un año hubo una variación del 85%.

Además, en 2019 había unas 40 viviendas. Para este año llegaron a ser 121 viviendas. El asentimiento triplicó su tamaño y las condiciones de vida son de extrema precariedad. El año pasado, el 50% de las viviendas eran de ladrillo y el otro 50% de lona, silobolsa, maderas y chapas. Al 2020, la composición es 64% de las viviendas fabricadas con materiales mixtos y solo 36% de ladrillos (F: Ciudad Futura).

Te puede interesar

TE PUEDE INTERESAR

No puedes copiar el contenido de esta página.