(Carreras) Luego de una extensa jornada de negociaciones iniciada al promediar las 11 en el edificio del Ministerio de Trabajo de la Nación, el empresariado titular de la empresa textil Plenit (cerrada desde el lunes pasado en la localidad de Carreras), los representantes de los trabajadores, los funcionarios ministeriales y las autoridades locales firmaron un acta acuerdo donde la patronal se compromete a la reapertura de la fábrica textil (principal fuente laboral de la localidad), la reincorporación de los 90 trabajadores y el cumplimiento del pago de los sueldos caídos hasta el momento. La garantía del acuerdo y quien será responsable de la mediación entre la patronal y los trabajadores, según consta en el acta acuerdo, es el presidente comunal de esa localidad, Germán Batista. “Estamos muy conformes por el hecho de haber acompañado a los vecinos de Carreras en esta lucha, como así también agradecido en lo personal por la confianza que han depositado las tres partes: el Ministerio de Trabajo de la Nación y Provincia, los propios trabajadores y hasta el empresario con quien luchamos juntos para sacar la situación adelante”, señaló.
Hace un año, cuando Plenit presentó una situación adversa similar, aunque de menor magnitud, desde la Comuna local se le facilitaron una serie de herramientas parte de programas de preservación de empleo del Gobierno nacional, de las denominadas “anticíclicas” (del tipo REPRO) tendientes a asegurar la continuidad de las fuentes de trabajo. En aquel momento, aquellos elementos fueron ignorados por el empresario. “Hoy el panorama es distinto. El empresario sabe que gestionaremos, junto al Gobierno nacional, todos los mecanismos existentes. Para este proyecto cada fuente de trabajo es esencial. Y en ese sentido caminaremos. Pero es fundamental el compromiso que él (por el empresario) asuma, y que cumpla con su palabra ante todos nosotros. Vamos a ser guardianes de que eso que se firmó, se respete”, concluyó Batista.
Cabe destacar que el cierre de la empresa, sucedido intempestiva y unilateralmente días atrás, generó un profundo malestar social en la localidad. Sabido es que el ritmo de producción que venía llevando adelante la empresa no justificaba el supuesto momento de crisis y tampoco los contratos existentes con empresas de primera línea; sino que las dificultades provenían de los avatares financieros e impositivos de la firma. “Si la patronal cumple con su palabra, el lunes la fábrica está en marcha”, concluyó Batista. Agregando: “De lo contrario, volveremos a la carpa frente a la fábrica y comenzaremos a transitar otras alternativas. La prioridad nuestra es garantizar el derecho al trabajo. Las herramientas jurídicas existen”.
