La crisis de financiamiento que se disparó en los últimos días y la complicada situación económica en la que queda el país sumó incertidumbre a la situación en torno al proyecto de autopista Rosario-Rufino. El recorte en la obra pública y el freno que sufrieron los promovidos proyectos de Participación Público-Privada, sembraron dudas sobre su concreción.
En declaraciones con el programa Tardes Picantes de Radio Ciudad, el intendente de Rufino Natalio Lattanzi afirmó que se iniciarán las obras del primer tramo de la autopista 33 que va desde Rufino a San Eduardo. El mandatario rufinense confirmó que faltan los permisos de paso de 1.500 metros para completar el tramo necesario para que la empresa Supercemento inicie la obra. Además, aclaró que estos permisos fueron rubricados por los propietarios de los campos por donde pasará la autopista, que tendrá en ese tramo una extensión de 18,5 kilómetros. Una vez liberados esos terrenos, se dará comienzo a las obras.
Lattanzi, a su vez, comentó que está en “contacto permanente” con el ministro Guillermo Dietrich y con Javier Iguacel, de Vialidad, y que los funcionarios nacionales le aseguraron que la obra se encuentra presupuestada y que se realizará. En cuanto a la actualización de costos producto de la devaluación, indicó que está contemplada en los contratos.
En relación a los restantes tramos de la autopista 33, desde Venado a Rosario, así como la ruta 7 y la variante La Picasa, explicó que son obras incluidas en el plan de Participación Público Privada (PPP). Sin embargo, los rumores acerca del pedido del Fondo Monetario Internacional de paralizar esos programas generan incomodidad en las dirigencias regionales. Lattanzi, en este caso, despejó las dudas y reiteró que los funcionarios nacionales le confirmaron la concreción del proyecto.