El viernes pasado la Comuna de María Teresa obstruyó totalmente un canal que distorsionaba el natural drenaje de las aguas pertenecientes a la cuenca de Las Encadenadas y lo desviaba hacia la cuenca de La Picasa. En ese proceso, modificaba el curso natural del agua y derivaba el fluido a través de todo el distrito María Teresa generando serias modificaciones medioambientales e hídricas. Y con ellas gravísimas consecuencias de destrucción de caminos rurales que quedaban bajo agua, inundación de terrenos productivos y la llegada de mayores flujos de agua al casco urbano, generando un serio riesgo de inundación en el pueblo. “En las últimas tres grandes lluvias de enero y febrero, María Teresa estuvo a un pelo de inundarse gravemente”, alertó el presidente comunal de esa localidad Gonzalo Goyechea.
Tras años de presentar los reclamos ante el Comité de Cuenca de Las Encadenadas, la Comuna decidió actuar en defensa propia.
Equipados con maquinaria pesada y personal comunal, la Comuna de María Teresa procedió a obstruir totalmente el mencionado canal.
“En la crisis hídrica del año 2001 se hicieron muchos canales con el visto bueno de Recursos Hídricos de ese momento. Esas canalizaciones jamás se registraron o regularizaron, entonces si uno ve en los registros de la provincia figuran como clandestinos”, planteó Goyechea. Según el mandatario local este canal aceleraba la llegada de las aguas desde Murphy, San Eduardo y Venado Tuerto, pertenecientes a la cuenca Las Encadenadas; y las direccionaba hacia María Teresa; desviando toda esa masa de agua hacia la cuenca de La Picasa.
El distrito María Teresa presenta la particularidad de pertenecer a dos cuencas distintas. Por un lado la mayoría del territorio pertenece a la cuenca La Picasa y, en una porción muy inferior, a la cuenca de Las Encadenadas. El agua de la cuenca de La Picasa corre todo hacia el distrito de Teodelina, de allí fluye a la laguna de Junín, el Río Salado para morir en la Bahía de San Borombón.
“Ese canal también llevaba el agua hacia la laguna de Runciman. Desde donde tapamos nosotros hacia la laguna de Runciman, nunca se había realizado mantenimiento o bien lo han tapado intencionalmente. No lo sabemos. Nosotros hicimos vista satelital y es difícil determinarlo. Pero esa agua que venía de San Eduardo y Venado Tuerto, que tendría que ir para la cuenca de Las Encadenadas ahora cruzaba para la cuenca de La Picasa, y entonces atravesaba todo nuestro distrito, cuando de otra forma solo cruzaría una parte reducida”. comentó.
“Nos afectaba gravemente porque modificaba todo y hacía que el agua no hiciese el recorrido natural. Va inundando bajos, que rebalsan e inundan nuevos bajos. Inundan campos productivos, caminos rurales y provoca levantamiento de las napas. Siempre trajeron graves consecuencias en María Teresa. Siempre planteamos que el agua tenía que seguir su recorrido natural, y resulta que no era así. Entonces hacía años que se venía pidiendo al Comité de Cuenca Las Encadenadas que lo tapen, que solucionen ese problema. Teóricamente los distritos tenemos que denunciar los canales clandestinos. Lo denunciábamos y como no nos daban soluciones fuimos y los tapamos” describió.
A modo de conclusión el jefe comunal afirmó: “Nosotros tenemos un orden de prioridades en materia hídrica. Para nosotros la prioridad es que el agua no ingrese al casco urbano, la segunda prioridad son los caminos rurales, y la tercera de máxima relevancia son los campos productivos”.