(PR/GiulianaGhignone) Betina Passon es grafóloga y desde hace 22 años estudia las características psicológicas de las personas atenta a la forma y los rasgos de su escritura. A través de esta técnica lleva adelante la orientación vocacional de quienes la convocan curiosos por conocer qué puede aportarles desde su especialización.
“La grafología permite conocer cuáles son nuestros dones, con los que nacemos. Generalmente la gente cree que tenemos uno solo y en realidad contamos con varios dones, cualidades o capacidades, muchas de ellas heredadas. Esas son las inteligencias múltiples”, explica Betina. Sin embargo, destacó que algunas personas lo descubren solos y otros no, entonces pueden recurrir a esta herramienta.
La profesional explicó que a través de la escritura y de varias entrevistas se analizan los temperamentos, a los que definió como la esencia de la persona y que se los clasifica como nervioso, sanguíneo, bilioso y linfático. “Todos tenemos uno predominante y los otros en segundo, tercer y cuarto grado”, agregó. A partir de estos rasgos se elabora el análisis.
“En orientación vocacional los chicos siempre evalúan qué pueden estudiar, qué les gustaría y ¡está perfecto! pero pocas veces se piensa en función del trabajo como: con qué acompañamiento económico y emocional cuenta, si es una persona introvertida o extrovertida, si podría trabajar en sociedad o no, el bienestar económico que pretende. El trabajo conlleva todas estas situaciones”, explicó Passon.
Si bien es un estudio que ya tiene décadas, en la ciudad va ganando cada vez más aceptación y venadenses que se encuentran culminando sus estudios secundarios recurren a este servicio. Los interesados pueden comunicarse a través del 3462-562407 o el Instagram @instituto_privado
