(PR/GiulianaGhignone) A principios de octubre Puentes del Alma emprendió una nueva misión solidaria, un viaje a Salta y Jujuy, rincones del país muchas veces olvidados, con la esperanza de poder seguir apoyando a escuelas que forman parte de un paisaje remoto.
Con el propósito de acompañar a estas comunidades, la ONG trabajó durante meses en la coordinación y recolección de juguetes, alimento, ropa, materiales de construcción y electrodomésticos. “A veces nos preguntan por qué nos vamos tan lejos, este es uno de los motivos, es hacerle saber que estamos cerca, que no somos indiferente, que creemos en el esfuerzo y sacrificio de muchos para lograr el objetivo, es la simpleza de la vida misma en el camino que se recorre”, expresó la referente de Puentes del Alma, Patricia Lugaro.
En esta oportunidad, un grupo de doce “puentes” visitaron las escuelas de Pucallpa, Trigo Huaico, Rodeo Pampa, La Falda, Punco Vizcana, San Juancito, Puesto, San Felipe, Hornillas, San Marcos, Barrios y San José Aguilar. En cada una de ellas pudieron entregar todo lo que, gracias a la solidaridad de particulares y empresas de la región, se recaudó.
Viajes en los que se acumulan las historias, como la de San Juancito, una escuela que ayudó a construir Puentes en la montaña. “Fue el pedido de un papá que se acercó a la escuela de San Felipe, donde estábamos en ese momento, para decir que los niños de su comunidad caminaban muchas horas para llegar a clases. Nosotros nos comprometimos a que si ellos hacían los ladrillos de adobe y levantaban las paredes, íbamos a llevar las chapas, puertas, ventanas y así se hizo. Se fue construyendo por etapas a partir del 2010”, recordó Lugaro.
Durante esta travesía tampoco faltaron los cálidos festejos por los 30 años de la Organización y las cartas a modo de agradecimiento por la presencia y el apoyo. “Fue muy emocionante, no lo esperábamos. En cada escuela tenían programado un festejo y el último día hicieron una fiesta en el salón del pueblo, los maestros lo decoraron todo. Era una manera de retribuir los 30 años que Puentes va por esa zona, fue muy inesperado, la placa fue una sorpresa también. Uno no viaja esperando algo y es más lo que nosotros nos traemos como personas que lo que llevamos”, comentó.
La ONG de Venado Tuerto nació en el 94´. En su larga trayectoria, acumuló cientos de viajes, brindando trabajo solidario en diferentes escuelas, donde sus miembros fueron testigos de realidades muy duras, carencias materiales y necesidades de las más básicas insatisfechas. A través de sus redes, la ONG expresó su felicidad por el compromiso asumido, “Feliz aniversario y gracias a todos por tantos años de solidaridad. Todo comenzó sin darnos cuenta y el tiempo pasó, nos unió, nos vio crecer. Subimos sueños en la caja de un camión que nos lleva por el camino del sol, hacia la ruta del alma. Es un viaje sin escala al centro del corazón humano donde extendemos nuestras manos, a nuestros hermanos olvidados. Entre cerros, ríos y quebradas a caballo o en largas caminatas, nos vamos llenando de esperanzas con cada bienvenida, con cada beso, con cada abrazo, con sus miradas. Y allí están los sueños con blanco delantal, agitando sus manitos curtidas de tanto trabajar, esperando a sus padrinos, en el norte argentino. A los maestros, nuestros amigos, la noche los enriquece de secretos, la oscuridad y el silencio los acompañan. Ellos son los que hacen patria solos, allá arriba, en la montaña y nosotros, los del sur santafesino, seguiremos trabajando para que no les falte tanto, porque eso es lo que somos, un puente de unión entre la llanura y la montaña. Somos ´Puentes del alma´”.
En este sentido, Lugaro expresó “Reconocemos el camino cuando observamos, cuando miramos, cuando tocamos, creo que fuimos sembrando amistad, mucho cariño por parte de la gente. Vimos crecer a todos los niños que hoy son adultos con familias y a mi me pasa en lo personal que reconozco los rostros. Es muy fuerte porque cuando uno hace por solidaridad lo hace por amor a la tolerancia, al respeto a la diversidad, a las personas. Uno cree mucho en la gente y en los sueños y pudimos hacer realidad muchos sueños”.
A modo de cierre, la responsable de la ONG adelantó el próximo viaje, esta vez al Impenetrable Chaqueño, programado para noviembre y para el cual siguen recibiendo donaciones. “Todavía nos queda el ultimo viaje del año donde dejamos los útiles para el comienzo de año de los chicos. Para que tengan sus carpetas, útiles. También se puede colaborar con alimentos, budines y cosas navideñas porque es una fecha especial para todos por eso también los regalitos que llevamos para que los maestros tengan la posibilidad de entregarles ese presente en nombre nuestro como si fueramos Papa Noel”, explicó Lugaro.