En un primer tiempo a todo ritmo, Juventud Pueyrredón lo iba a arrancar ganando desde el vestuario, Fernando Moreno se encargó de abrir la cuenta para que festeje todo el barrio Santa Fe. Con el 1 a 0, el “Pulga”, siguió buscando como si el encuentro estuviera igualado, su plan, con la ventaja en el marcador, no cambió. De esta manera los dirigidos por Luis Agli, dejaban venir a Rivadavia y salían rápido de contra.
A los 13’ y tras un tremendo derechazo que Escobar le sacó a Luna, Rodrigo Aglieri manejó el ataque visitante y cuando tuvo espacio sacó un remate que Jonatan Guerra alcanzó a desviar para cumplir con la ley del ex, haciendo el 2 a 0.
Dos minutos más tarde y en otra contra, tras un tiro de esquina, Farías la entregó mal y Alain García, de pillo, se llevó el balón por derecha, desbordó y habilitó a Guerra que solo tuvo que empujarla para el 3 a 0.
A penas se cumplían 15 minutos y la visita sacaba una enorme ventaja, ante un confundido Rivadavia que no reaccionaba.
Hasta que a los 26’ en una jugada aislada, el optimismo de Luna pudo más y después del centro de Toledo, la peinó Farias y el goleador de la V, Guillermo David Luna, descontó para establecer el 3 a 1.
Más allá del grito del local, el Pulga lo jugaba con otro temple, cada vez que había una dividida el visitante era más. García y Moreno alternaban de derecha a izquierda, logrando confundir al mediocampo de Rivadavia.
A los 35’ la V pidió penal, pero el árbitro Barboza consideró que el balón le dio en la panza a Alan Sanz
La última del primer tiempo fue para Pueyrredón, García remató pero la pelota dio en el costado de la red, ante la pasividad de la defensa de Rivadavia que pensó que el árbitro había anulado la jugada. Sin embargo el encargado de impartir justicia dejó seguir y el “Pulga” casi pone el cuarto.
En el complemento se iba a dar un partido distinto a lo que ocurrió en los 45 iniciales, el primer remate de la segunda mitad iba a llegar recién a los 17’, cuando Aglieri exigió a Sayavedra que mandó el esférico al tiro de esquina.
Ese disparo pareció avivar un poco el juego y dos minutos después González no pudo transformar en gol el gran centro de Alain García.
Recién a los 32’ la V azulada tendría su primera chance, una vez más iba a ser de Luna, quien hizo revolcar a Walter Escobar que salvaba al Pulga.
A los 36’ Barale la tuvo dentro del área y tras un rebote, Lucero la agarró muy abajo y la tiró muy por encima del travesaño.
Sobre los 40’, Rivadavia, aunque sin ideas, seguía buscando descontar y Mauro Farías de cabeza, se lo perdió para la visita cuando se la entregó a las manos a Walter Escobar.
De ahí en más, el Pulga se defendió y siguió jugando, como toda la tarde, con los dientes apretados, para llevarse un triunfo más que merecido.