El domingo pasado, Estudiantes de La Plata se impuso en los penales ante Vélez Sarfield, tras empatar 1 a 1 y levantó la Copa de la Liga 2024.
En medio de los festejos por la obtención del título, el compañero periodista pincharrata Ramiro Residente Poce nos comparte su sentimiento en este texto visceral:
«Ayer un amigo de la filial CABA parafraseaba a John William Cooke: “Estudiantes es el hecho maldito del país burgués”. En un fútbol cada vez más concentrado, donde su base material y su superestructura (todo el contenido periodístico de los medios masivos) se reduce a River y Boca, el Pincha lo hizo otra vez. Es campeón, con sus banderas de siempre, el nosotros antes que el yo, la familia unida, los ídolos que retornan a la institución buscando algo intangible.
El barba Dominguez se amalgamó con un equipo de jugadores nacidos y criados en la institución más los que llegaron de afuera y adoptaron la escuela transmitida en cada rincón del Club y desde las tribunas: ‘A los jugadores les quiero decir que tiene que dejar la vida. Acá en Estudiantes hay que laburar como nos enseñó Zubeldía’.
El día que murió Menotti, un técnico que supo ser el símbolo de un establishment del país, el destino quiso que el equipo del narigón, vuelva a levantar la copa. La levantó Sosa, Carrillo, Enzo, Ascasibar, Fede Fernandez, el plumero Piatti y también la levantó Mansilla, Palacios, Correa, Cetré, Zaid Romero, Lollo y el comandante Zuqui. La levantó Gastón Benedetti llegando desde la cantera y Mancuso, de pasado Xeneize, clavando un gol de antología. La copa la levantó Domiguez y también Sabella, Bilardo, Zubeldía y Simeone. La levantaron Russo y Manera, la bruja y la brujita. La levantaron Malbernat junto a Madero, Aguirre Suarez, Boselli, Pavone, el bocha Ponce, el ruso Prátola y el loco Poletti. La levantaron Magnano y los profesores.
Un pueblo que olvida su pasado está condenado a repetir sus errores. Estudiantes es memoria, identidad y acción colectiva. El Pincha fue el primer equipo que rompió la hegemonía de los grandes con el Metro del 67 y en el 2024, con un fixture que obligó a los hinchas a viajar a Córdoba cuando no hay un peso y en día de semana porque así lo quiso un grande, el club financió el viaje de los hinchas a Santiago del Estero para vivir la final».
