El secretario general del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor de la República Argentina (Smata) y secretario Gremial de la CGT Regional Venado Tuerto, Luis Cuichi, analizó en diálogo con PUEBLO Regional el acuerdo alcanzado entre la cúpula nacional de la CGT y el Gobierno por la reforma laboral.
“De acuerdo a las circunstancias es una noticia que tiene varios componentes. Se hizo lo que se pudo, pero, lamentablemente, lo que se pudo no es lo que el trabajador espera, sino todo lo contrario, y sigue generándose un problema muy serio que, Dios quiera, se supere cuando el proyecto de reforma llegue a las cámaras”, evaluó el dirigente gremial.
Profundizando su análisis, Cuichi aseguró que se llegó a este pacto “por presiones del Gobierno sobre algunos componentes del triunvirato y la mesa directiva de la CGT, entonces esto hace que volvamos a viejas prácticas, presionando con carpetas y demás”.
El titular de Smata reconoció responsabilidad en los dirigentes gremiales, “porque si yo tengo algo que no corresponde, lo que tendría que hacer es correrme y dejar que los que negocien sean otros”.
Sobre los cambios que logró la CGT en la reforma laboral propuesta por el Gobierno, Cuichi detalló: “Lo que se hizo fue negociar algunos puntos. Vinieron con 50 puntos y se lograron atemperar los efectos de esos 50 puntos en 40. Lamentablemente esto deja la puerta entreabierta para que dentro de poco vengan nuevamente, vuelvan a presionar, y con una patada terminen de abrir la puerta de manera que al trabajador le cambie la filosofía de lo que es la ley de contrato de trabajo”.
El dirigente destacó, por otra parte, que “nosotros hemos advertido en su momento que esto, lamentablemente, iba a suceder porque es un gobierno pensado y basado en cuestiones de igualdad entre el trabajador y el empleador, y todos sabemos que esto no existe. El capital sobre el trabajo siempre intenta imponerse y explotarlo al máximo y si no hay un Estado activo que regule todo ese tipo de cosas estamos en un problema muy serio. Lamentablemente el trabajador pierde en todo y en el futuro empezarán a caer la mayoría de sus derechos, hasta que logren su objetivo que es que desaparezcan”.