(PR) Por estos días tomó trascendencia nacional e internacional la postura del intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella, de denunciar públicamente a los delincuentes de la ciudad, iniciativa que también logró importante repercusión mediática.
Sin embargo, esta metodología ya había sido propuesta por la concejala mandato cumplido Liliana Rostom (PJ), en 2010, pero entonces la iniciativa recibió un inmediato rechazo del resto de los ediles y medios de prensa.
“En marzo de 2010, sería la primera o segunda sesión del año, propuse esto y fue muy mal visto, tal es así que no lo votaron ni mis compañeros de bloque. Yo había asumido en diciembre de 2009 por el Justicialismo y no me acompañaron, les parecía un espanto mi propuesta”, recordó Rostom en diálogo con Pueblo Regional.
En su proyecto de resolución la ex edila señalaba: “Pedimos autorización para que la prensa pueda publicar las fotos de los procesados condenados para de ese modo estar alertados sobre el rostro de la persona involucrada en un delito grave”.
Rostom afirmó que su propuesta “fue muy cuestionada, incluso por la prensa que son los formadores de opinión, pero los vecinos que me encontraban en la calle o cualquier lugar, no lo veían mal. La idea era trabajar en prevención, porque eso iba a servir y seguramente no hubiésemos llegado donde estamos ahora”.
Trazando un paralelo con el presente de la ciudad, la ex concejala planteó que “en aquel momento esto se vio mal, ahora se aplaude, y los actores son más o menos los mismos”; y puntualizó que hizo presentaciones del mismo tenor, con algunas modificaciones, a lo largo de toda su carrera legislativa, siempre con la misma mala suerte.
Otro antecedente de la publicación del nombre y foto de delincuentes, en este caso de guantes blancos, fue la amenaza del ex intendente Roberto Alcides Scott (a mediados de la década del 90’) de publicar la identidad de los grandes evasores de la ciudad.
“Scott decía que a las personas que tenían varias propiedades y debían muchos impuestos, o tenían autos 0Km y debían mucha patente, había que exponerlas ante la ciudadanía, pero eso también fue muy mal visto”, rememoró Rostom.
