(PR/Norma Migueles) Tres años y medio de ocurrido el homicidio del joven Federico Landriel en Santa Isabel (29 de mayo del 2020) y muchas postergaciones, se llevará adelante el juicio en Venado Tuerto a un sujeto acusado de ultimarlo a balazos en inmediaciones de Francia y Ruta 8, cuando la víctima iba a trabajar a una cerealera.
La fiscalía, ahora a cargo de Rafaela Florit, solicitará la prisión perpetua bajo la calificación “Homicidio doloso agravado con el propósito de causar sufrimiento a una persona con la que se mantiene o ha mantenido una relación de pareja en carácter de autor”. Calificación que ya había planteado su antecesor el fiscal Horacio Puyrredón, en tanto que la querella solicita en forma accesoria el homicidio simple.
El tribunal colegiado estará integrado por los jueces Leandro Martín, Adrián Godoy y Aldo Baravalle. La querella será ejercida por el abogado Juan Manuel Baima. Se estima que, de no modificarse la cantidad antes del debate, por acuerdo de partes, por lo menos 60 testigos pasarán por el estrado.
Postergación
Si bien había expectativas de llegar a un acuerdo a través de un juicio abreviado, con una condena de 16 de años de prisión de cumplimiento efectivo, en el marco de las nuevas leyes de procesamiento, por la calificación y el monto de la pena, el acuerdo tenía que contar con la aprobación de la Fiscalía Regional y de la Fiscalía General y en este último tramo es donde habría surgido el rechazo.
En consecuencia, tuvo que modificarse la fecha original del juicio que era el 5 de noviembre, para que, tanto la nueva fiscal como la defensa, pudieran interiorizarse sobre la investigación.
Los hechos
La teoría del caso de la Fiscalía es que el 29 de mayo de 2020 “en momentos en que Federico Landriel se dirigía a su trabajo en la planta de la firma Hathor, en su bicicleta verde por calle Francia en dirección a la Ruta Provincial 94, el acusado abordó y luego disparó en la cabeza con un arma de fuego causándole la muerte”.
En los días previos a lo ocurrido el acusado trataba de amedrentar a Landriel e incluso llegó a manifestar en distintas ocasiones, a la esposa de la víctima y otras personas, que lo iba a matar.
Días antes del homicidio varios testigos vieron al agresor parado con su automóvil en la intersección de calle Francia y Ruta Provincial 94, esperando a que pasara Federico Landriel para su trabajo.