El Foro de Promoción Defensa y Derechos de las Personas con Discapacidad reclamó ayer el cumplimiento del Programa de Salud mediante la entrega de un petitorio en la Casa Rosada dirigido al presidente Mauricio Macri. Con la consigna “Marcha de las Sillas Vacías”, el foro solicitó “señales claras y que se dé garantía de la continuidad de los servicios e ingresos mínimos”, tras rechazar “la provincialización de los Servicios de Incluir Salud”. La presencia de más de cien sillas de ruedas dando vueltas en la Plaza de Mayo fue más que elocuente de las necesidades que padecen. Una de las participantes explicó: “Queremos que el ingeniero Macri tome conciencia de primera mano de la crítica situación de las personas con discapacidad”.
Para Incluir Salud se destina una partida para el pago de servicios de 1600 millones de pesos por mes, lo mismo que el año pasado para prestar “servicios específicos, medicación de alto costo, prestaciones de apoyo o educación inclusiva”. La organización reclamó, además que “se dé marcha atrás con la decisión generalizada de dar de baja pensiones no contributivas por invalidez por incompatibilidad de acuerdo con el decreto 432/97”.
Marita Domínguez, de la Cámara de Entidades Médico Asistenciales para la Rehabilitación Interdisciplinaria de la Discapacidad, contó por qué marcharon: “Queremos reivindicar la situación de las personas con discapacidad, que realmente están abandonadas por el Estado nacional”. Domínguez comenzó delineando un panorama general (desolador): “Pensiones por incapacidad laboral o por invalidez son casi un millón. En el país hay cinco millones de personas con discapacidad según el Indec”. En ese sentido, indicó que “si hay un 30 por ciento de población con pobreza, estás con más de un millón y medio de personas pobres y con discapacidad”.
La preocupación está basada en las más de 70.000 pensiones que se dieron de baja el año pasado, en sólo treinta días. Aunque muchas fueron devueltas, entre la suspensión y la reanudación pasaron entre tres y cuatro meses en los que las personas no cobraron el beneficio (alrededor de seis mil pesos). “Están en riesgo las prestaciones dado el contexto”, manifestó Domínguez, aludiendo a que durante el debate del Presupuesto en Diputados, el radical Martín Lousteau planteó que “hay un excedente de discapacitados” y dio datos falsos respecto de la cantidad de uruguayos con pensión por discapacidad, por ejemplo, para cuantificar el exceso en la Argentina. Entre otras cifras falsas, aseguró que en la Argentina “hay más personas con pensión por discapacidad que muertos en Estados Unidos, Holanda y Polonia, sumados, en la Segunda Guerra Mundial”.
“Hay que entender que aumenta la cantidad de personas con discapacidad ya que la ciencia permite ahora que sobreviva gente después de accidentes o enfermedades que no hace mucho habría muerto. Por eso marchamos, por el derecho de las personas con discapacidad actuales y potenciales a vivir en sociedad”, insistió Domínguez.
Y con respecto a los principales reclamos, expresó: “Pedimos que no se corten las pensiones necesarias. Que se corrijan y se corten las que están mal dadas, pero no cortar por las dudas y después vemos. También pedimos que el programa Incluir Salud cumpla con los plazos de pago, porque las instituciones y lo profesionales no podemos sostener indefinidamente esta situación. Y, casi lo más importante, que se actualicen los valores por las prestaciones, porque estamos quebrados. En los centros de día, por ejemplo, los pacientes no sólo hacen talleres sino que también reciben la comida”.
Domínguez cerró explicando: “Exigimos que se implemente la ley de cupo laboral para las personas con discapacidad. Muchos pueden trabajar y el Estado debe garantizar sus derechos. No podemos aislarlos como en el siglo XIX, que los ocultaban en el cuartito de atrás”.
