Nada bueno puede hacerse sin alegría». Fue la directora de Cultura municipal, Griselda Vaccarini quien confirmó la decisión tomada por el intendente José Freyre: los carnavales venadenses se suspenden. La decisión de Freyre se debió (según manifestó la funcionaria a FM Dale) “al clima de duelo de la ciudad y a la continuidad de las marchas ciudadanas reclamando por seguridad y justicia luego de los crímenes ocurridos”.
Otros funcionarios municipales fueron los encargados de señalar a PUEBLO Regional On Line que “se suspendieron los festejos de los carnavales por el evidente clima de inseguridad (…) y por el duelo por los asesinatos de Gastón Teglia y (Braian) Brito”. Y se lo intentó parangonar con lo ocurrido en la vecina localidad de Arias donde durante una fiesta realizada en una carpa instalada en el corsódromo, ocurrieron graves hechos de violencia. Pero en Venado Tuerto no ocurrió así.
Según publicó el portal colega Venado 24: Vaccarini aclaró que estaba confirmado para esta oportunidad el auspicio del Ministerio de Turismo de la Nación y por ende se contaba con los fondos enviados desde dicha repartición. De esta forma desmintió la posibilidad de una especulación económica en dicha suspensión. ¿Pero qué implica en realidad esto de suspender carnavales tradicionales como los venadenses, por estas causas? Algo mucho más peligroso que la mera falta de recursos económicos. Con la suspensión de este festejo popular queda en debate no solo el respeto por el trabajo de los cientos y cientos de chicos y adultos de los barrios (muchas veces promovidos por el propio Municipio en un trabajo acertadísimo de integración social). Las murgas y comparsas barriales que durante todo 2012 trabajaron para este evento en concreto (si bien se plantea la posibilidad del traslado a otros acontecimientos para que muestren sus trabajos); sino además, y principalmente, una definición política que es un mensaje claro (peligroso y erróneo) de total falta de disputa del espacio público desde lo simbólico y lo concreto. Suspender los carnavales por esas causas (inseguridad y duelo) es abonar al planteo reaccionario, mentiroso y angurriento de mano dura (caos y apocalipsis) de determinados contestadores radiales que le marcan el pulso a cierta dirigencia y que sostiene: “En Venado Tuerto no se puede salir a la calle”. Desafortunadamente con esta medida demagógica se consolida el mensaje del miedo, de la segmentación social, del quedarse encerrados, del ombliguismo de los ‘90. Venado atraviesa un momento de dificultad que es grave, pero que no es muy distinto al de otras ciudades de igual tamaño. Y la respuesta debería ser más participación, más gente en la calle, más integración de vecino con vecino; con alegría. Gastón y Braian fueron asesinados. Sus familias, amigos y comunidad sufren una inmensidad. Pero la justicia está trabajando para esclarecer los hechos. Y con resultados efectivos y expeditivos. Sólo nos resta intentar seguir adelante, por difícil que sea, pero con fe y esperanza. Esta demagogia detiene. Engarrota los músculos. Empeora.
El secretario de Seguridad Pública y el secretario de Organización del PJ disienten
En otro contexto, pero sí refiriéndose a la cuestión del espacio público y el miedo (en concreto a los sucesos de Nuevo Alberdi donde 3 militantes del Movimiento Evita fueron baleados por una banda narco-policial) y a las jornadas que precisamente allí organizó esa agrupación, José Luis “Pepe” Berra (secretario General del Movimiento Evita Santa Fe y miembro de la conducción del PJ santafesino) señaló: “(…) creemos que el peor mensaje que se puede dar es hacer lo que justamente le estamos criticando al gobierno provincial y al gobierno municipal (de Rosario), que es retirarse de las barriadas más humildes y dejarla liberada a la suerte de los vecinos y de las bandas mafiosas. Nosotros creemos que no hay que retirarse del barrio. Al revés. Tenemos que recuperar el barrio para la comunidad, tenemos que recuperar los barrios como un elemento para que la gente pueda vivir tranquila, en paz, y recuperar esa paz social significa que tienen que estar en el barrio presente todos los actores, políticos, sociales, estatales. Tenemos que llevar el Estado a los barrios. Y eso es lo que intentamos hacer muy humildemente desde el Movimiento Evita en esas jornadas (en Nuevo Alberdi luego de la balacera), y lo que hacen nuestros compañeros que militan en el territorio”.
Por su parte Matías Drivet (secretario de Seguridad Pública de la Provincia), respecto a la peligrosidad de recluirse por el miedo y dejarle el espacio público a los delincuentes, señaló a PUEBLO Regional On Line: “Hay un proyecto que está implementando la Red Solidaria que se llama “veredazo”. Lo están haciendo en numerosos lugares del país y consiste en que la gente salga y esté en la calle tomando mate, con los chicos, entre todos, cuidándonos. Cuando estamos todos en la calle ocurren menos circunstancias graves. A mi me cuesta mucho hablar a la distancia, dar un sermón sobre lo que debería hacer o no un distrito, tengo la precaución de no expresarme (N. del E: se refiere a la suspensión de los carnavales en Venado Tuerto). Lo que si le digo es que las fiestas populares en general, como puede ser un partido de fútbol, son formas de manifestar lazos de sociedad que tenemos que construir. Si hay consecuencias negativas que tenemos es haber permitido que determinados modelos y lógicas de países no tan remotos, que se iniciaran desde hace décadas y se profundizaron en los ’90; rompieran vínculos sociales construidos durante larguísimos años; y que son muy difíciles de reconstruir. No me gusta opinar sobre el caso concreto, pero sí digo que tenemos que reconstruir esos lazos. Yo no se si con una fiesta como el carnaval o de otra forma… El carnaval tiene la característica de que es la fiesta que, en todos lados (sea con agua, con disfraces, con harina como en el norte) es la fiesta que iguala a pobres y ricos, dejando liberar la alegría y las tristezas contenidas en el año”. Y lo comparó con lo sucedido este fin de semana en María Teresa: “Espero que la fiesta del carnaval en María Teresa tenga la alegría que tiene que tener para que sea una fiesta para toda la comunidad”.