Rosana es maestra de música, Gustavo carpintero desde los 13 años y hace poco más de 3 años decidieron emprender en el mundo de los juguetes para niños. Desde Pueblo Regional nos acercamos para conocer la historia de este matrimonio que supo unir sus pasiones, la pedagogía y la carpintería para construir pequeñas y coloridas obras de arte.
En el 2017 crearon La Casa de Los Juguetes, “empezamos con esto por necesidad, aquel fue un año muy duro”. De a poco el emprendimiento fue creciendo y haciéndose conocido por los venadenses pero también en otras provincias donde participan de ferias veraniegas, “siempre que nos vamos de vacaciones llevamos en una valija juguetes” cuenta entre risas Rosana.
Sin dudas dos artesanos de la vida, cargados de alegría, energía, permeables a lo que la realidad les presenta y enamorados de la niñez. Pasan sus días imaginando y elaborando diferentes piezas en madera. Una dupla que sin dudas funciona al unísono.
Cada artículo está pensado desde todos sus aspectos, “son de madera porque es un material noble, se pueden arreglar, acerca a los niños a la naturaleza. A la vez los colores elegidos no son al azar, son colores llamativos, vibrantes. Dejamos de lado esto de la diferenciación por sexo. Todos pueden jugar con todo. Además, son juguetes que corresponden principalmente a la pedagogía Montessori. “describen orgullosos de sus creaciones.
“Construir estos juguetes me lleva a mi infancia” cuenta emocionado Gustavo. Ellos trabajan con pasión y dedicación para los más pequeños, observándolos en su juego diario, lo cual también funciona de inspiración para sus nuevas invenciones. La creatividad nunca se acaba para esta pareja que entiende que hay que cuidar y proteger la niñez a capa y espada, propiciar la imaginación y la autonomía.
“En un viaje a Entre Ríos, nos contaron acerca de su lucha para desalentar el uso de fibrofácil ya que está comprobado que es perjudicial para la salud. Sería algo así como lo que sucede aquí con los insecticidas que se usan en los campos. Por eso decidimos elegir madera maciza como materia prima respetando y uniéndonos a su reclamo. Lo cierto es que cuando entrás en este mundo vas tomando cada vez más conciencia de lo natural y de lo ecológico” agrega Gustavo.
Elegir de manera consciente con qué juegan nuestros hijos es una manera de inculcar en ellos principios tan importantes como la ecología, el reciclaje, la independencia, creatividad y el apoyo a emprendedores locales.