(Pueblo Regional) Al cierre de la semana pasada, finalmente, un grupo de inspectores de la provincia se apersonó en el frigorífico Swift Minerva de Venado Tuerto para constatar si la planta estaba originando malos olores y los motivos del problema.
Trascendió luego de la visita que el frigorífico está en infracción y que se detectaron tres focos de olores en el proceso de producción, que la empresa deberá atenuar con una serie de obras. También se habrían detectado infracciones al plan ambiental.
Esa es toda la información existente en la ciudad sobre el tema según informó a Pueblo Regional el jefe del Nodo Venado Tuerto, Diego Milardovich.
En un intento por acceder a más detalles este medio consultó al concejal Fabián Vernetti, del Frente Progresista Cívico y Social, con fuerte llegada al gobierno provincial, pero la respuesta fue muy similar.
“Con Milardovich estuvimos comunicados con la coordinadora de Medio Ambiente de la zona Sur, Liliana Boggio, y desde el lunes a la mañana tratamos de indagar y saber más sobre esto para informar a los vecinos, pero como había sido muy reciente la inspección todavía no tenía un informe en detalle. Ahora vamos a hacer un pedido formal desde el Concejo”, indicó Vernetti.
En la misma línea nebulosa, el edil señaló que “lo que sabemos es que el frigorífico está en infracción, que en el tratamiento de los efluentes se le piden tres obras para atenuar el impacto de olores y además se labraron actas de infracción porque están violando el plan ambiental”.
Lo que no se pudo saber hasta el momento es el alcance de las medidas dispuestas por Medio Ambiente, ni siquiera si la planta será multada o podrá seguir operando normalmente mientras ejecuta las obras solicitadas.
De todas formas el dirigente socialista se mostró confiado en que “esto va a encaminar la situación”.
Por otra parte, Vernetti se quejó porque días antes del inicio del proceso de faena habían mantenido una reunión con las autoridades de la empresa, que incluso presentó a un ingeniero encargado de la parte ambiental, “y nos tranquilizaron, nos llenaron de certezas sobre cosas que jamás pasaron después. Nos dijeron que tenían todo controlado, que cuando hacen todo el proceso de los efluentes pasan por tres rejillas donde van quedando los residuos sólidos que son los que luego se descomponen y producen mal olor, que recién después iban a lagunas donde estaba todo preparado y que este es el frigorífico que más lagunas de decantación tiene en el país, porque tienen seis”.
En la misma reunión las autoridades del Swift también aseguraron que “no tenían fecha ni precisiones de cuándo empezarían a despostar y ni hablar de cuándo iban a empezar a faenar. Esto fue un lunes o martes y al lunes siguiente salió en el diario que empezaban a faenar. Fue una mentira impresionante”.
En este punto el legislador remarcó que “las inversiones que tienen que hacer son mínimas” y las estimó en un costo de 100 mil dólares, “en una empresa multinacional que va a exportar y que son millones de dólares los que maneja en el negocio. Lo que uno siente es que ni siquiera se detienen a pensar en el prójimo”.
Paralelamente opinó que estas empresas “necesitan un correctivo que se los tiene que dar, fundamentalmente, el Ministerio de Medio Ambiente que tiene el poder de restringirle el funcionamiento, de clausurar o lo que sea”.