(PR/Norma Migueles) Este lunes, en los Tribunales de Venado Tuerto, se realizó una audiencia de revisión de medida cautelar en el que la Defensa solicitó la libertad de un hombre, quien está detenido desde noviembre de 2023 imputado por los delitos de abuso sexual con acceso carnal y abuso sexual gravemente ultrajante en contra de una joven que, en principio, se suponía que era su hija biológica. Los hechos ocurrieron en la ciudad de Villa Cañás.
El abogado defensor Mauro Blanco ofreció como caución un automotor valuado en 6 millones de pesos, la guarda de dos personas y un trabajo en zona rural ofrecido por un contratista, todo en la localidad de Maggiolo.
La fiscal Florencia Schiappa Pietra se opuso a la liberación y se comprometió ante el juez Adrián Godoy elevar la acusación en un plazo de 30 días corridos. El magistrado hizo lugar a la petición y ordenó que el imputado continúe en prisión preventiva.
El hombre asistió a la audiencia por zoom desde la Alcaidía de Melincué, donde permanece detenido desde la imputación y solicitó hablar, manifestó su inocencia y aseguró que nunca la faltó el respeto a la joven, aclarando que no es su hija.
Una historia de violencia
Los hechos devienen de una familia en situación de vulnerabilidad y una relación interrumpida en sus inicios y retomada años después.
Todo comenzó con una mujer que tenía un marido muy violento y se relacionó con el imputado. Cuando quedó embarazada lo abandonó temiendo el castigo del marido, quien anotó la niña como hija propia.
Varios años después, la mujer y el supuesto padre de su hija se reencontraron y se casaron, contando con la supuesta paternidad del hombre sobre la niña que luego fue abusada.
La víctima sufre una discapacidad intelectual leve y una incapacidad física en uno de sus brazos. En primer lugar, le habló a su madre sobre los manoseos que le infería quien hasta ese momento se suponía que era su padre y, como suele suceder, la mujer lo minimizó. Luego, la chica le confesó los abusos a su hermana quien le sugirió que pusiera una cámara para grabarlos.
Así lo hizo y lo registrado mostró cuando el sujeto la somete en la cama sin que se pueda percibir en ese momento el acceso carnal que, según su testimonio, había ocurrido días antes.
Los hijos de la mujer y hermanos de la víctima, que vivían en Venado Tuerto, fueron hasta Villa Cañás e increparon al abusador hasta la intervención policial.
Tras la denuncia y posterior detención del sujeto, se inició la etapa de colecta de pruebas y el ADN demostró que la joven no era hija del imputado.



