(PR) La diputada nacional libertaria por la provincia de Santa Fe, Romina Diez, es la autora del proyecto de reforma laboral que el gobierno de Javier Milei buscará impulsar en breve desde el Congreso. La propuesta incluye modificaciones en la jornada de trabajo, indemnizaciones y convenios colectivos.
Con el viento de cola que le brindan los resultados de las elecciones del último domingo, el Gobierno nacional buscará fogonear la propuesta de Diez que ya comenzó a generar algunas protestas.
“Esta reforma laboral o modificación de algunos artículos del contrato de trabajo, es un proyecto que tenía una impronta antes de las elecciones y ahora tiene otra”, comentó la apoderada de la UOM (Unión Obrera Metalúrgica) de Venado Tuerto, Analía Sarza, aunque aclaró que “por más que hayan tenido un triunfo relativo en estas elecciones, igual en el Senado y Diputados se va a pelear este tema”.
La profesional profundizó sobre los alcances de la reforma que “no es otra cosa que modificar derechos y vulnerar los principios de progresividad del trabajo y de protección, que son principios establecidos en nuestra Constitución Nacional y a nivel internacional”.
Sarza apuntó que desde la UOM Venado Tuerto, a través de su secretario general Diego Olave, se viene haciendo un trabajo de comunicación y asesoramiento a los delegados sobre este tema.
Doce horas diarias
El proyecto de Diez contempla una ampliación de la jornada laboral, que podría extenderse hasta un máximo de doce horas diarias, modificando el límite actual de ocho horas.
“Lo que proponen es respetar como mínimo las 12 horas de trabajo, lo cual podría implicar tener que trabajar 12 horas diarias. Igual esto tendría que ser acordado a través de un convenio colectivo de trabajo y de ahí surgen el banco de horas y las compensaciones, porque ahora esas horas extras no se pagarían, sino que se las compensaría con francos o vacaciones, pero no con dinero”, explicó la abogada.
La idea del gobierno es que, con esta política laboral, las empresas tomarán más personal registrado, ante lo cual Sarza planteó que “esto no es así, porque con otras medidas que se han tomado se erradicó la ley 24013 que establecía las multas. La quita del castigo a la no registración no funcionó y ahora la restricción de los derechos de los trabajadores tampoco funcionará”.
Para hablar en términos claros, la letrada explicó que “es una especie de retorno a la esclavitud, vas a trabajar lo que diga la patronal, siempre que no se superen las 12 horas”.
En el proyecto de la diputada santafesina también se prevé para las pequeñas y medianas empresas, la posibilidad de abonar las indemnizaciones y multas derivadas de sentencias judiciales en hasta doce cuotas mensuales.
Según aclaró la abogada de la UOM para poder avanzar en este punto se debería llegar a un acuerdo con los gremios, negociación que hasta el momento se encuentra estancada.
La iniciativa libertaria también apunta a la desfinanciación de los gremios, estableciendo que la cuota sindical, que en la actualidad es obligatoria, pase a ser voluntaria. En el caso puntual de la UOM Venado Tuerto, además de lo estrictamente gremial, desde el sindicato se ofrece asistencia familiar, educativa, beneficios sociales o la escuela de oficios, actividades que se verían debilitadas si se recortan los ingresos por cuota sindical.
Para evaluar los pormenores de la reforma laboral en puerta, desde la UOM organizarán talleres con los delegados y los trabajadores para analizar los distintos aspectos del proyecto en defensa de los derechos de los trabajadores.
Otras modificaciones
La normativa que en breve sería tratada por el Congreso también permitiría el fraccionamiento del período de vacaciones, lo que habilitaría a los trabajadores a tomar sus días de descanso en partes, según acuerdos que se establezcan.
La propuesta autorizaría la implementación de sistemas de banco de horas y otros esquemas laborales flexibles, los cuales se podrán negociar mediante los convenios colectivos de cada sector.
Se recuperaría la opción de abonar una porción del salario a través de prestaciones no dinerarias, como vales de comida o canastas de alimentos, un sistema conocido como “ticket canasta”.
El texto también se enfoca en otorgar beneficios fiscales a las pequeñas y medianas empresas para fomentar la contratación de nuevo personal, en una suerte de régimen de incentivo para inversores de menor escala.
