Por estas horas crece la conmoción e indignación en la ciudad de Victoria tras conocerse la muerte de la joven Berenice González, de 23 años, quien apareció descompensada en la plaza San Martín de esa ciudad entrerriana, el viernes a la mañana.
Tras hallarla en tal estado, fue derivada al hospital local y luego trasladada a la ciudad de Paraná por su grave estado de salud. En ese nosocomio, los médicos determinaron que la joven presentaba signos compatibles con violación.
Lamentablemente, Berenice, quien era mamá de un niño de 4 años, murió este sábado a la madrugada. Esta mañana hubo una marcha por las calles de Victoria pidiendo justicia.
Además, la Policía de Entre Ríos realizó distintos allanamientos y detuvo a dos personas, aunque no se descartan más arrestos ni bien avance la investigación.
El hecho
Según informó el diario Clarín, Berenice fue hallada el viernes, alrededor de las 6, en la zona de la Escuela Laprida. En primera instancia fue trasladada al Hospital Fermín Salaberry, de Victoria, donde intentaron reanimarla. Tenía indicios de haber sido drogada con estupefacientes y la derivaron al Hospital San Martín de Paraná por la gravedad del cuadro.
Aunque una versión preliminar indicaba un posible intento de suicidio, descubrieron que en realidad presentaba signos compatibles con una violación. Con esta nueva revelación, el fiscal Iván Yedro ordenó una serie de allanamientos, uno de ellos en una vivienda ubicada en calle Italia al 700, donde detuvieron a un hombre de 46 años. Además, la Policía arrestó a Zaira, una joven de 25 años, quien había brindado falso testimonio en el comienzo de la investigación: su versión se contrapuso con la que brindó la familia de la víctima.
De acuerdo a la familia, Zaira era amiga de Berenice y poco después de la medianoche del viernes, la llamó para invitarla a una fiesta. Allí fue donde la joven fue drogada y golpeada: tenía marcas en la espalda y mucho líquido en el estómago, informó el mismo medio.
A pesar de esta situación, Berenice logró huir y quiso entrar a un colegio. Ahí fue cuando los vecinos advirtieron a la policía sobre lo que estaba ocurriendo. Cuando la encontraron comenzó a convulsionar y la trasladaron al hospital.
La Fiscalía cree que fue la propia Zaira quien la llevó engañada y habría oficiado de “entregadora”. Además de los dos detenidos, la policía busca otras seis personas.
Lamentablemente, a las 0.50 de este sábado, Berenice tuvo «muerte encefálica, seguida de paro cardíaco». Horas más tarde, a las 9, se realizó una marcha en la plaza San Martín de Victoria para reclamar justicia.
Según su madre, Berenice trabajaba como moza y hacía changas. «Me la mataron, la torturaron, no sé cómo hacer para vivir después de esto. Era hermosa y buena. Hablaba con todo el mundo, la querían todos. Tenía amigos en todos lados», contó la mujer.
Por su parte, Sonia, su abuela, manifestó: «No merecía morir así. Fue tanto lo que le hicieron que le destrozaron la vida hasta perderla. Mi nieta hermosa, mi hermoso ángel ahora. Asesinos y asesina deben pagar».
«La Justicia debe dar un fuerte castigo y no dejarlos salir más de prisión porque pueden volver a hacerlo. Pido justicia por mi nieta, ruego a Dios por mi princesita y su hijito quien quedó sin su mamá», concluyó.
