(PR/Giuliana Ghignone) En 2022 la Comuna de María Teresa puso en funcionamiento el Centro de Atención a la Niñez y Familia (CANyF). Un espacio donde hoy asisten alrededor de 50 niños.
“El CANyF en María Teresa es un espacio de atención integral para la contención de niñas, niños y adolescentes de entre 6 y 14 años en situación de riesgo social, con madres o padres que realizan tareas informales, que tienen que salir a trabajar para adquirir elementos básicos de subsistencia y no tienen quienes los cuiden, de esta forma se evita que el niño no salga a trabajar con su familia o que quede en casa al cuidado de hermanos y haciéndose responsable de tareas domésticas”, contó Jésica Manzanares, coordinadora del lugar.
De acuerdo con el diagnóstico inicial realizado por la institución, aproximadamente son 50 niños y niñas de alrededor de 20 familias que se enfrentan a la ausencia constante de adultos en sus hogares debido a empleos urbanos informales. Esta situación no sólo los exponen a un mayor riesgo, sino que también los carga con responsabilidades domésticas y de cuidado de sus hermanos afectando su propio desarrollo y bienestar.
El centro funciona de lunes a viernes en turnos de mañana y tarde, y está diseñado específicamente para adaptarse al horario escolar de la única escuela primaria local. Esto permite que los niños de primer a tercer grado asistan por la mañana, mientras que los de quinto a séptimo grado lo hacen por la tarde. En cuanto a las actividades que llevan adelante durante la jornada, Manzanares detalló “se abordan distintas situaciones teniendo en cuenta siempre el objetivo que es fortalecer las condiciones de crianza de niñas y niños,ofreciendo cuidados y acompañamiento en momentos cuyos referentes adultos están desarrollando trabajos informales”.
Por este motivo, en la Institución los niños tienen la posibilidad de merendar o desayunar siguiendo un plan diseñado por una nutricionista y reciben apoyo escolar. También, hay una articulación con la escuela primaria local, en comunicación directa con los docentes de cada niño, de esta forma se está al pendiente de lo que ellos necesitan. En el caso de inasistencia reiterada se interviene con el equipo de Niñez, Adolescencia y Familia de la Comuna, del que participa también el Área de Promoción Social. En paralelo se trabaja en la incorporación de hábitos.
Las docentes que trabajan asistiendo y acompañando a las niñas y niños, toman como eje transversal la ESI, haciendo énfasis en el cuidado del cuerpo, en su higiene personal, cada niño y niña cuenta con la posibilidad de ducharse porque contamos con un baño con ducha e implementamos el cepillado de dientes en lo cotidiano, ya que muchos de ellos no contaban con cepillos en sus casas; profesionales de la salud visitan el espacio para brindar charlas necesarias en pleno proceso de desarrollo, odontólogo, ginecóloga, médicas y enfermeras. Se realiza vacunación, control de peso y de talle. Hay talleres recreativos y de digitalización, este último se dicta en Punto Digital que se encuentra en el Centro Integrador Comunitario y ayuda a desarrollar habilidades digitales esenciales que le permiten navegar en el mundo en línea, de manera más efectiva y segura. “La mayoría de niños/as que asisten no cuentan con herramientas informáticas en su hogar, por lo que este taller es una importante oportunidad, ya que permite fomentar el interés en la informática y en la tecnología”, describió la coordinadora.
A toda esta labor cotidiana se sumaron las salidas semanales para conocer e interactuar con integrantes de otras comunidades “actualmente, los días lunes por la mañana, llevamos a cabo un taller de teatro en conjunto con la Residencia de Adultos Mayores. Este encuentro revela una interacción enriquecedora entre dos generaciones, evidenciando tanto las diferencias como las similitudes en el juego y la diversión”, resaltó Manzanares.
