A horas de la inauguración del Hospital Gutiérrez de Venado Tuerto comienzan los análisis sobre el tiempo que se demoró en la construcción y la importante inversión que representó para el Estado provincial.
En este marco, el ministro de Salud santafesino, Miguel González, que ya está instalado en la ciudad esperando el acto inaugural que será este sábado con la presencia del gobernador Miguel Lifschtiz, explicó por qué se demoró una década en terminar la edificación y poner en marcha el nuevo nosocomio.
“En el país pasaron muchas cosas en estos últimos diez años que afectaron el avance de las obras. Por otra parte hay que tener en cuenta que las grandes estructuras hospitalarias, los hospitales centenarios que hoy tenemos en la Provincia, se ha tardado mucho más que diez años en su construcción”, graficó González.
Por otra parte, apuntó que “hubo momentos difíciles en la Provincia. Nosotros iniciamos un plan de infraestructura solo con recursos propios, porque en aquel momento no había consenso para que la Provincia tomara créditos para hacer infraestructura de largo plazo. Hoy estamos en otra situación. Tuvimos un 2009 en el que la recaudación cayó muchísimo y tuvimos que hacer un gran esfuerzo para sostener las obras, y se hicieron un poco más lentas, pero seguimos incorporando trabajadores a la salud y seguimos pagándoles a tiempo los sueldos”.
El ministro puso el acento en que “las obras se ejecutaron con recursos propios de los santafesinos” y destacó que si se hubiesen recibido en tiempo y forma los aportes de coparticipación retenidos durante años por la Nación “todas las obras ya estarían terminadas”.
A modo de conclusión González remarcó que “pensar en diez años de construcción para hospitales que van a durar cien años no es nada”.
