La semana pasada el secretario de Obras Públicas municipal, Pablo Rada, fue notificado oficialmente de la caída del proyecto de ampliación del Gasoducto Regional Sur que iba a permitir un aumento significativo de conexiones a la red en Venado Tuerto y todo el sur santafesino.
El motivo de la mala noticia es un fuerte recorte en el presupuesto del Ministerio de Energía nacional, que, por otra parte, le exige al Municipio venadense (administrador de los fondos girados para la obra) que devuelva la inversión realizada para la compra de los caños.
Hace cerca de un mes ya se le había adelantado a los funcionarios y dirigentes locales la posibilidad de que el ajuste en el Estado nacional afectara esta y otras obras en el interior del país: “Desde el Municipio seguimos analizando distintas alternativas, nos juntamos con la gente del Centro Regional para el Desarrollo y Litoral Gas y les ofrecimos la posibilidad de que se quedaran con los caños a cambio de hacer obras en el sur de Santa Fe. También hablamos con la gente de Tenaris, que es la empresa que construyó los caños, para ver si podían reubicar ese material y con ese dinero financiar obras, pero se nos fueron cerrando todas las puertas”, informó Rada.
Con todas estas negativas en la mochila, en el mediodía del 23 de agosto Rada fue recibido por las autoridades del Ministerio de Energía nacional que le confirmaron la caída del proyecto.
El secretario de Obras Públicas recordó que las gestiones por la ampliación del Gasoducto comenzaron en 2014 y estuvieron a cargo del ex responsable del área, Daniel Dabove, en diciembre de 2015 ya estaban comprados la mitad de los caños que se iban a emplear, “en 2016 se terminaron de comprar los caños, pero a partir de ahí es como que el Gasoducto se planchó, el presupuesto nos decían que estaba pero que no se iba a actualizar”, detalló el funcionario.
Sobre los caños comprados y pagados, Rada adelantó que están gestionando una reunión con la firma Tenaris (del grupo Techint) que es la que construyó los caños para tratar de negociar una devolución del material y recuperar el efectivo y la otra opción es que el gobierno provincial, a través de la empresa de gas santafesina, se quede con los caños”.
“Se viene un camino difícil, pero que lo queremos cerrar, porque el primer interesado en cerrarlo es el Municipio. Nosotros lo queríamos cerrar con una obra, no con una devolución, pero ante el hecho consumado de que la ampliación no se concretará, lo primero que debemos hacer como gestión es dejar las cuentas claras”.
