Por Fernando Cáceres BUENOS AIRES, (DyN) – El kirchnerismo, con la ayuda de aliados, logró mantener este domingo el control en el Senado de la Nación tras los comicios nacionales que implicaron la renovación de un tercio de esa Cámara, en ocho provincias.
El oficialista Frente Para la Victoria consiguió once bancas propias, el mismo número que puso en juego aunque con un cambio en el orden de la representación en cinco distritos electorales (Ciudad de Buenos Aires, Neuquén, Salta, Santiago del Estero y Tierra del Fuego); pero perdió tres de las cinco bancas aliadas que se arriesgaron. No obstante, con estos resultados y después del 10 de diciembre, el Kirchnerismo logrará alcanzar de igual manera el quorum en ese Cuerpo Legislativo, con 33 senadores nacionales propios y cuatro aliados.
Pero estos números, no sólo dependen del resultado electoral, sino de los comportamientos políticos que comenzarán a registrarse ya a partir de mañana sobre todo en la interna del peronismo, dado posibles nuevos liderazgos y sus probables realineamientos, y nadie puede asegurar que el oficialismo consiga manejar la Cámara a su antojo y llevar adelante cualquier tipo de iniciativa.
De las 24 bancas en juego, el kirchnerismo arriesgó 11 propias y 5 aliadas, y, si bien perdió dos aliados, logrará con los 3 que ingresan más la peronista pampeana María Higonet el consabido número de 37 para poder sesionar.
Además, el oficialismo, cuenta con aliados circunstanciales como la ex reutemannista Roxana Latorre, el correntino José María Roldán (Frente de Todos) y su co-provinciana del Partido Liberal de Corrientes Josefina Meabe, que en más de una oportunidad lo acompañaron en el Recinto.
Sin embargo, las fuerzas en la Cámara Alta se mantendrán casi iguales. El centenario partido perdió tres de sus 14 bancas: una por Santiago del Estero de Emilio Rached (aunque hace seis años había entrada por el aliado K Frente Cívico por Santiago), la del entrerriano Arturo Vera y la de Río Negro, a manos de la representante del Frente Progresista Magdalena Odarda, que le arrebató el segundo lugar al ex gobernador radical K Miguel Saiz.
El kirchnerismo, en cambio, perdió la banca del porteño Daniel Filmus, otra banca en Neuquén, la que hasta ahora ocupa Nanci Parrilli, pero ganó dos en Salta, donde no tenía representación, y dos en Tierra del Fuego,(donde contaba con los aliados de Nuevo Encuentro María Rosa Díaz y Osvaldo López).
En tanto, perdió la banca de un aliado circunstancial, la del porteño Samuel Cabanchik, y otra del representante del Movimiento Popular Neuquino Horacio Lores, (aunque el MPN obtuvo dos escaños pero de un sector anti- K, cuyos senadores electos son el sindicalista petrolero moyanista Guillermo Pereyra y Lucila Crexel, hija de la fallecida intendenta de San Martín de los Andes y ex senadora nacional Luz sapag). En Santiago del Estero, el oficialismo cosecha las dos bancas de su hasta ahora incondicional aliado Frente Cívico por Santiago del gobernador Gerardo Zamora, que postuló a Daniel Brué y Ada Iturrez de Capellini, y además suma la banca que ganó el Frente Popular, una colectora zamorista que ocupará Gerardo Montenegro.
Por Entre Ríos, en tanto, el kirchnerismo mantuvo las dos bancas por la mayoría y el PRO con ruralista Alfredo De Angelis desplazó al radicalismo por la minoría.
En la Ciudad de Buenos Aires el Frente Para la Victoria, pese haber ocupado el segundo lugar en las PASO, debió resignar la banca de Filmus, además se retiran los otros dos senadores porteños que ingresaron por la Coalición Cívica (Cabanchik y la ex cavallista María Eugenia Estensoro), que serán ocupadas por los macristas Gabriela Michetti y Diego Santilli (el PRO llega por primera vez al Senado).
En río Negro, en cambio, el kirchnerismo se aseguró la reelección del jefe del bloque K, Miguel Pichetto, acompañado por la actual diputada nacional Silvina García Larraburu; en ese distrito el radicalismo confía en conseguir una banca a través del ganador en la interna de la UCR el ex gobernador Miguel Saiz, quien –aseguran- se sumará al bloque pese a haber sido uno de los gobernadores radicales K más alineados con la Casa Rosada.
Una provincia que parecía resignada para el kirchnerismo es Neuquén, aunque a pesar del resultado de las PASO, lorgó retener la banca de Marcelo Fuentes y solo perdió una.
Y en el Chaco, mantuvo las dos bancas que hoy posee por ese distrito y la minoría recayó en el ex mandatario provincial radical Angel Rozas.
Salta estará representada, desde el 10 de diciembre, por Rodolfo Urtubey (hermano del gobernador provincial) y otra para María Cristina Fiore Viñuales, por la lista del Frente Para la Victoria, que ganó la mayoría sin tener hasta ahora representación, y la minoría recayó en el actual senador y ex gobernador provincial Juan CArlos Romero.
Por Tierra del Fuego, el kirchnerismo estrenará las bancas para la actual diputada nacional Roxana Bertone y para Julio César Catalán Magni, por la mayoría y el curul por la minoría será para Jorge Garramuño del MOvimiento Popular Fueguino.
