(PR/Pablo Salinas) La situación hídrica en la cuenca de La Picasa sigue siendo compleja por estas horas, luego que el domingo último desbordara el espejo de agua y cubriera algunos kilómetros de la Ruta 7 en el distrito Rufino.
Desde este martes maquinarias enviadas por el gobierno provincial están trabajando en la zona tratando de aliviar la situación y bajar el nivel de la laguna.
En este sentido, el presidente del Comité de Cuenca Laguna La Picasa, Juan Carlos Duhalde, describió en diálogo con VerTV: “Después de mucho trabajo desde lo hídrico logramos bajar la laguna a la cota 101,68, pero después de un noviembre y diciembre con lluvias normales, en el mes de enero cayeron entre 400 y 500mm en toda la zona y en febrero 200mm más”.
La intensa precipitación del verano llevó la cota de los 101,68 a 102,74, y se espera que siga creciendo en la medida que ingrese más agua de otros distritos y se mantenga el nivel de lluvias de las últimas semanas.
Duhalde precisó que este martes llegaron dos máquinas retroexcavadoras de la Provincia para trabajar de profundizar el nivel del canal por gravedad de la Estación Alternativa Norte para que siga saliendo el agua hacia territorio bonaerense.
Vale recordar que la cuenca La Picasa abarca alrededor de 500 mil hectáreas y en la provincia de Santa Fe cerca de 300 mil hectáreas, incluyendo los distritos de Teodelina, Villa Cañás, María Teresa, Christophersen, San Gregorio, Diego de AlveRuta 7ar, Rufino, Amenábar, Aarón Castellanos, Lazzarino y Sancti Spíritu.
Solución hídrica
Para el presidente del Comité de Cuenca, la solución tiene que ser de orden hídrico, “es mucho más fácil bajar la laguna, porque solamente hace falta que Buenos Aires autorice y reciba el agua, a buscar una solución vial”, como sería el traslado de la traza de la Ruta 7.
Por otra parte, planteó que si bien la parte más profunda de la laguna corresponde a campos destinados a ganadería, el rebalse que se está produciendo en la actualidad está afectando a “zonas de alta producción, según los cálculos del INTA. Siempre decimos que Córdoba y Buenos Aires defienden a sus productores y su producción, y en Santa Fe no podemos darnos el lujo de no defender lo nuestro”.
El dirigente también se refirió al fallo de un juez federal de Junín que ordenó detener las obras en La Picasa y realizar un nuevo estudio de impacto ambiental: “Santa Fe tiene que actuar desde lo jurídico, dar vuelta este fallo, o pedir que el juez se haga cargo de las consecuencias que esto pueda traer, porque si se corta de nuevo la Ruta 7 y el ferrocarril, recomponer esas dos obras representará muchos millones de dólares”.
